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Grandes mexicanos ayudaron a Fidel Castro a hacer y triunfar en la Revolución Cubana

El Presidente Ruiz Cortines lo liberó y el ex Presidente Lázaro Cárdenas del Río lo apoyó en su salida hacia Cuba

– Discurso del Lic. Mauro Jiménez Lazcano, Director General de la Revista Macroeconomía, ante el Club Rotary Internacional Toastmasters 4170, el 26 de julio de 2023, 70 Aniversario de la Revolución Cubana.

Apreciables rotarias y rotarios de Club Toastmasters 4170:

Es para mí un verdadero honor dirigirme a ustedes para referirme a la estrecha relación entre México y la República de Cuba; siempre difícil pero siempre amable; el cariño entre los dos pueblos y el respeto entre mexicanos y cubanos que ha sido permanente y sincero.

EL General Lázaro Cárdenas del Rio saluda al pueblo de Cuba, al lado del Comandante Fidel Castro Ruz, al triunfo de la Revolución Cubana, en el año 1959

Hace 70 años que Fidel Castro Ruz y un grupo de jóvenes cubanos y también latinoamericanos, entre ellos el “Che” Guevara, iniciaron la Revolución Cubana, el 26 de julio de 1953; independientemente de los lazos históricos que siempre han unido a México y Cuba, quiero referirme al lapso de esa fecha inicial a nuestros días acudiendo a fuentes directas que me relataron en mi calidad de periodista y lo que vi como funcionario público de la Presidencia de la República en el Sexenio 1970-76 del Presidente Luis Echeverría Álvarez, quien visitó por primera vez la Isla de Cuba en 1975, para entrevistarse con Fidel Castro Ruz, del domingo 17 de agosto al viernes 22 de ese mismo mes.

El joven abogado Fidel Castro Ruz había escapado de la persecución del Presidente Batista, luego de haber atacado al Cuartel Moncada, y llegó a México donde se avecindo y conoció a un joven argentino estudiante de medicina que se llamó Ernesto “Che” Guevara; con él y otros jóvenes cubanos practicaban el tiro de rifle, pistola y ametralladora en algunos sitios baldíos de los alrededores de la Ciudad de México, entre ellos uno a la salida a la carretera vieja a Puebla, en el páramo de San Bernardino; fue entonces que el Jefe de la Dirección de Investigaciones Políticas de la Secretaria de Gobernación, Capitán Fernando Gutiérrez Barrios supo de ello y los aprehendió y encerró en las instalaciones de esa corporación, colindantes al Monumento a la Revolución Mexicana.

Al conocerse este acontecimiento por la policía política de Cuba, el Presidente de ese país, General Fulgencio Batista, realizo un telefonema al Presidente de México que entonces era Don Adolfo Ruiz Cortines, a quien solicitó los entregará a la Embajada de Cuba para ser repatriados a su país, a quienes consideraba Batista delincuentes y en especial a Fidel Castro, como un prófugo de la justicia; pero el Presidente Ruiz Cortines quien era un hombre muy hábil y astuto, hablo con su Secretario de Gobernación, Don Angel Carvajal y le ordenó que soltara “discretamente” a esos muchachos, para no caer en un conflicto internacional.

Por su parte, Fidel Castro Ruz, quien por cierto era un abogado brillante en su país, supo que el General Lázaro Cárdenas del Rio era un hombre de ideas avanzadas y acudió a él para pedir ayuda que se le concedió y todo el grupo salió hacia Veracruz para llegar a Tuxpan y conseguir un barco de pescadores mexicanos cuyo nombre era “granma”, que no era una palabra griega sino que simplemente quería decir “gran mamá” o “abuela”, y en ese navío se embarcaron para llegar a las costas de su país, subir a la Sierra Maestra y desde ahí, luego de una larga lucha de seis años, lograr el triunfo el 1 de enero de 1959, en que derrocaron al dictador Fulgencio Batista.

TENSAS RELACIONES ENTRE CUBA Y MEXICO, DESDE EL TRIUNFO DE LA REVOLUCION CUBANA

Las relaciones entre México y Cuba fueron tensas desde que el Comandante Fidel Castro Ruz tomó el poder; pero aquí se hace notar que al triunfo de la Revolución y en el festejo del mismo, estuvo como invitado especial de Fidel Castro el General Lázaro Cárdenas del Rio, y que mucho tiempo después, en el gobierno del Presidente Luis Echeverría Álvarez, el capitán del Ejército mexicano, Don Fernando Gutiérrez Barrios, fue el contacto personal del gobierno mexicano con Fidel Castro.

El Lic. Mauro Jiménez Lazcano, entonces Director de Difusión y Relaciones Públicas de la Presidencia de la República Mexicana, se despide del Presidente Fidel Castro Ruz, al concluir la visita de Estado, que realizó a Cuba el Presidente Luis Echeverría Álvarez, el 22 de agosto de 1975

En ese lapso, de 1959 a 1975, las relaciones entre México y Cuba fueron tensas y difíciles, propias de lo que entonces se llamó la Guerra Fría; incluso se recuerda el 26 de julio de 1968 en que hubo contingentes antigubernamentales en el Zócalo de la Ciudad de México, para celebrar la Revolución Cubana.

Cuando se dice que las relaciones entre México y Cuba eran difíciles, me refiero a que estaba cortado el comercio entre los dos países y que los viajes por avión de ida y vuelta estaban controlados y se fotografiaba y se tenían listas de los pasajeros nacionales y extranjeros que viajaban de México a La Habana o de La Habana a México ya fueran mexicanos o extranjeros.

El pueblo cubano, por el bloqueo de los Estados Unidos, carecía de medicinas y alimentos producidos en Occidente y se empezaba a sufrir las consecuencias de esas medidas económicas drásticas contra Cuba.

Les recuerdo que México fue el único país que no se unió al bloqueo a Cuba en la Reunión Interamericana de Punta del Este, el 31 de enero de 1962, en declaraciones que hizo nuestro Canciller Don Manuel Tello, en nombre del Presidente Adolfo López Mateos.

UN GIRO EN LAS RELACIONES DE MEXICO CON CUBA PLANTEO EL PRESIDENTE ECHEVERRIA EN VISITA A LA HABANA EN 1975

En forma de culminación de una gira por el Caribe que incluyó Jamaica, las Bahamas, la Guyana Holandesa, el Presidente Luis Echeverría incluyó una visita de Estado a la República de Cuba, donde fue recibido con gran cariño y reconocimiento por el pueblo cubano y su Presidente el Comandante Fidel Castro Ruz y todo su Gabinete.

El entonces muy notable Canciller cubano Raúl Roa, declaró ante la extraordinaria recepción en el aeropuerto “José Martí” de La Habana, que:

“Un recibimiento así no se puede hacer para todos. Se hace porque se trata de México y porque se trata del Presidente Echeverría”.

El Presidente de México fue recibido con todos los honores, se dispararon 21 cañonazos y la población de la capital cubana se desbordó desde el aeropuerto y por la carretera hasta llegar al centro de la ciudad.

El Presidente Fidel Castro Ruz declaró: “Este recibimiento es una muestra y una expresión de nuestra simpatía por el pueblo de México; de nuestra solidaridad latinoamericana y de nuestro reconocimiento al Presidente Echeverría por su actitud sumamente amistosa hacia Cuba”.

En los 6 días que duró la visita de Estado, en la que participó la señora María Esther Zuno de Echeverría, esposa del Presidente de México, se recorrió toda la Isla; se visitaron escuelas de todos los niveles, centros de trabajo y hubo contacto con diversos sectores de la población.

“PONER FIN A LAS GUERRILLAS Y AL INTERVENCIONISMO EN MEXICO”

En las pláticas entre el Presidente y Fidel Castro se trataron asuntos de colaboración económica, científica y tecnológica; en el abastecimiento de medicinas, alimentos y asesoramiento del Instituto Nacional del Petróleo para descubrir y desarrollar mantos petrolíferos tanto en la superficie como en el fondo del mar; pero el Presidente Echeverría le solicitó amistosamente a Fidel Castro poner fin al patrocinio de guerrillas en México y a un intervencionismo y activismo político como se manifestó en la década de los años 60’s y el Movimiento de 1968.

Fidel Castro, hombre práctico, inteligente y necesitado de ayuda política y diplomática accedió al planteamiento del Presidente Echeverría y lo cumplió; a la vez, el Presidente Echeverría dispuso un despliegue de técnicos mexicanos del Instituto del Petróleo para ayudar a Cuba a desarrollar su industria petrolera y también industria telefónica, a través de la empresa Teléfonos de México que entonces era una empresa paraestatal, y la apertura del comercio de medicinas, alimentos y otros insumos necesarios.

Fidel Castro también aceptó la solicitud de México para que sus barcos pesqueros de camarón, langosta y otras especies no violaran los límites de pesca mexicanos, en la sonda de Campeche y las costas de Yucatán, donde se abastecían de esas pesquerías.

En un discurso en el comedor oficial del Palacio de Gobierno, en La Habana, en comida oficial a la que invitó Fidel Castro al Presidente Echeverría y su comitiva, dijo:

“A nosotros nos gusta que vengan ilustres visitantes como ustedes porque es la única ocasión en que al ofrecer viandas de camarón también nosotros comemos; pero les informo que todo el camarón que pescan nuestras embarcaciones se dedica a la exportación para obtener a cambio leche para los niños…”.

Así explicaba Fidel Castro las incursiones de barcos pesqueros en aguas mexicanas, pero aceptó de buena gana y cumplió con suspender esas actividades en los litorales de México.

Fue una visita de Estado donde se lograron buenos acuerdos para los dos países, y Fidel Castro regresó a México como Jefe de Estado en tiempos de López Portillo; asistió a la Toma de Posesión del Presidente Carlos Salinas de Gortari, y Vicente Fox también luego realizó una visita de Estado a La Habana, aunque después se produjo un incidente entre los dos Presidentes cuando Fox le dijo por teléfono, al hablar de la invitación a México a una conferencia internacional: “¡Comes y te vas!”.

HAMBRE Y NECESIDAD ACUCIAN A UN PUEBLO HEROICO

Al paso de 70 años, el pueblo heroico de Cuba es acuciado por el hambre, la necesidad y sobre todo la falta de libertad personal, libertad de expresión, de libertad de trabajo, de libertad de tránsito, lo cual es muy lamentable; nosotros los mexicanos, que ciertamente somos solidarios con el pueblo cubano, le deseamos en esta fecha lo mejor, y que en el futuro próximo encuentren la satisfacción de sus grandes necesidades y una vida de libertad y democracia.

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