Ante la baja de los precios internacionales del petróleo, el Gobierno Federal que encabeza el Presidente Enrique Peña Nieto está tomando las medidas responsables para mantener la estabilidad económica y social del país, que consisten en un recorte fiscal de 124.3 mil millones de pesos en gasto corriente y algunas inversiones que tendrán que posponerse como la del tren rápido a Querétaro y el Tren de la Península de Yucatán.
Explicó el Secretario de Hacienda, Luis Videgaray, que se evitará dañar servicios y prestaciones a la población; y que la mayor parte del recorte lo absorberán Petróleos Mexicanos con 62 mil millones de pesos y la Comisión Federal de Electricidad con 10 mil millones de pesos; entre ambas empresas absorberán el 60% del recorte.
La cantidad que no se gastará representa el 0.7% del Producto Interno Bruto.
El ajuste al gasto corriente ascenderá a 34.1 mil millones de pesos, para lo cual se reducirá el gasto en servicios personales, el gasto de operación y programas de subsidios.
Las medidas de austeridad y disciplina presupuestaria, incluyen la reducción de 10% en la partida de servicios personales para mandos medios y superiores, disminución del 10% del gasto en plazas de carácter eventual y por honorarios; restricción a la creación de plazas y reducción del 10% en el gasto destinado a Comunicación Social.
SE SUSPENDE TREN RAPIDO A QUERETARO
La parte más notoria de este recorte presupuestal será la suspensión indefinida de la construcción del Tren Rápido a Querétaro y la suspensión definitiva dela construcción del Tren Periférico de la Península de Yucatán.
En opinión de Macroeconomía, lo más importe es que no se dañen los servicios y prestaciones a las capas más necesitadas de la población nacional.
