“Guacamayas” y “El Rey del Cash”, desquician al Presidente en las Mañaneras

En una larga disquisición desde que era joven en Tabasco y Director del Instituto Indigenista en su tierra natal, en el régimen de López Portillo, el Presidente Andrés Manuel López Obrador explicó en la mañana del 14 de octubre de 2022, por qué odia a la prensa desde entonces, cuando los periódicos locales y pasquines le llamaban “comunista”.

Relató cómo el Gobierno de entonces incluso espiaba no sólo a él sino también a sus hijos, y a uno de ellos, “con engaños, le preguntó si yo le pegaba a mi esposa, su mamá”.

Todo vino a cuento por una pregunta relativa al espionaje que realizan hoy “las Guacamayas Hacktivistas” y por la publicación del libro “El Rey del Cash”, donde una ex colaboradora cercana revela la forma en que ha usado el dinero en efectivo para sus fines políticos.

“Dicen eso en el libro, pero yo ni para pagar un taxi traigo en la bolsa”, dijo el Presidente y contó como varias veces ha pedido prestado a amigos y personas “para pagar un café, pagar un taxi, incluso cuando ya había sido yo Jefe de Gobierno del Distrito Federal (ahora CDMX)”.

El Presidente se veía por televisión alterado, furioso y luego contrastando con sonrisas y hasta carcajadas: “No han podido conmigo los conservadores, gritó, y me espían desde hace 50 años, en los años de 1970 para acá, ja ja ja”.

“Un día que estaba yo en el aeropuerto, con un amigo, no traíamos ni para pagar el café ni él ni yo; me busqué en la bolsa y traía mi identificación en mi cartera con un billete de 200 bien dobladito, y con eso pagué”.

Explicó que “en Tabasco, a su hijo le daba monedas para ir a jugar, en las maquinitas, y se le acababa el dinero y un señor grandote le daba monedas para que siguiera jugando y le preguntaba a mi hijo si yo le seguía pegando a su mamá; ¡imagínense!”.

“¡Desde entonces me espían! ¡Desde los años 70’s!”.

Diciendo todo eso, negó que su gobierno “espíe a periodistas y escritores, con el sistema “Pegassus”, que las “Guacamayas” dicen que usa el Ejército Mexicano”.

“¡Y las Guacamayas, que bonitas aves! ¡Pero también hay zopilotes que andan rondando!”