China y México: Una relación madura, heterogénea y compleja
Así califica la relación entre las dos naciones, el excelentísimo señor Julián Ventura Velasco, embajador de México en China, quien accedió a conversar con China Hoy sobre el estado actual del vínculo bilateral.
China Hoy (CH): ¿Cuáles son las principales direcciones en las que se trabaja para profundizar el vínculo entre las dos naciones?
Julián Ventura (JV): Lo primero que diría es que la relación bilateral entre México y China, que ya de por sí es muy sólida, ha experimentado un gran dinamismo en los últimos meses. Los presidentes de México y China han elevado la intensidad del diálogo político al más alto nivel, lo cual es un resultado importante. Puedo decir, con toda seguridad, que esa intensidad en los contactos a nivel presidencial, con tres encuentros en un periodo de cinco meses, no tiene precedentes en la relación bilateral. En la visita de Estado del presidente Xi, se adoptó una declaración conjunta México-China. Invito a los lectores de China Hoy a revisarla, porque es un documento que da una hoja de ruta muy clara en lo económico, en lo político, en lo cultural, en lo educativo. Da cuenta de que la decisión de ambos países, de ambos gobiernos, de elevar la relación a una condición de asociación estratégica integral, debe estar, en la práctica, sustentada en acciones concretas en estos ámbitos.
CH: Mucho se habló, durante la visita del mandatario chino, del Tequila y la carne de cerdo que México exportaría a China. ¿Han comenzado a llegar a China productos que, tradicionalmente, no eran exportados a la mayor nación de Asia?
JV: En términos generales, la exportación de Tequila hacia China ha aumentado en los últimos años. De acuerdo con las cifras de la aduana china, que es la fuente más fidedigna para registrar la evolución de las exportaciones, en 2012, se registró un incremento del 100 % en la importación de Tequila, respecto de 2011. Las cifras que tenemos de 2013 solo cubren el primer semestre, pero reflejan un nivel similar a las de 2012. Esperamos que en el resto del año sigan manteniendo una tendencia al alza, sobre todo, ahora que ya tenemos el acceso al mercado del Tequila 100 % agave, que es el segmento de esta bebida que no podía exportarse al mercado chino en el pasado. En el caso de la carne de cerdo, ya tenemos los primeros contactos con empresas importadoras y pensamos que las ventas puedan iniciar muy pronto. En 2012, las importaciones que realizó China de carne de cerdo del mundo, aumentaron, casi, un 30 % y yo creo que esa tendencia va a ser muy propicia para que México empiece a insertarse y a tener una presencia en ese mercado. Lo que exportamos, en términos de productos mexicanos agroalimentarios a China, en 2012, fue casi tres veces más que en 2007. En 2011 y 2012, empezamos a exportar nuevos productos como pescados y mariscos, titanio, incluso partes de automóviles para la industria automotriz, prótesis médicas… En fin, son nuevos productos en los que estamos aprovechando las oportunidades que ofrece el mercado chino.
CH: Se planteó el propósito de acercar a los círculos industriales y comerciales de los dos países a través de seminarios, encuentros de negocios y otros eventos. ¿Qué se tiene previsto para lo que resta de 2013 y más a largo plazo?
JV: En primer lugar, en la declaración conjunta México-China, se anunciaron varias acciones. Se anunció la apertura de una oficina de la Secretaría de Economía en Beijing, dentro de la embajada de México en China. Ya contamos con esta nueva oficina que está operando con la participación de funcionarios muy capacitados y especializados en la relación económica, que vienen a complementar la presencia que ya tenemos en la embajada de Proméxico y del Consejo de Promoción Turística de México. En segundo lugar, se anunció la creación de un grupo empresarial de alto nivel. Ellos van a tener la tarea de generar recomendaciones a los presidentes de México y China sobre cómo fortalecer las relaciones económicas desde una perspectiva estratégica. En tercer lugar, está el tema de inversión. Uno de los resultados principales del encuentro que sostuvieron los presidentes en San Petersburgo, el 4 de septiembre, fue la firma de un acuerdo, por parte del presidente de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma, y el Secretario de Hacienda y Crédito Público de México, estableciendo un grupo de alto nivel en materia de inversión. Uno de sus mandatos es avanzar hacia la creación de un fondo binacional de inversión México-China. También, en esta dirección, en agosto, estuvo aquí el Secretario de Comunicaciones y Transportes de México para promover la inversión de empresas chinas en el sector de infraestructura de México, lo que motivó la visita, en octubre, de grandes empresas especializadas en la construcción de infraestructura, bajo el paraguas de la Asociación Internacional de Contratistas de China, CHINCA, que fueron a explorar las oportunidades que ofrece México. Una de las acciones que se acordaron en la visita de Estado es el hecho de que México será sede de la cumbre empresarial China-América Latina en el año 2015.
CH: Usted habló de “superar la tiranía de la geografía” al referirse a las 300 becas que ofrecerá el gobierno de China en los próximos tres años. ¿Cuántos mexicanos están ahora estudiando en China, al amparo de este ofrecimiento, y cuáles son los principales perfiles en los que se forman?
JV: Yo, efectivamente, he señalado que hay una distancia geográfica que, a veces, condiciona las percepciones que China tiene respecto a México, que los mexicanos tienen respecto a China y que uno de los vehículos principales para superar esa tiranía de la geografía es el intercambio académico. Ahora, contamos con un programa bilateral recíproco que es de 40 becas anuales. Con el compromiso adoptado en la declaración conjunta México-China, el gobierno de la República Popular China va a ofrecer 100 becas anuales, a partir de 2014. Estas becas, tentativamente, se van a dividir entre las 40 que ya se otorgan, como parte del programa bilateral, 10 que se otorgarán por conducto de la embajada de China en México y 50 adicionales, que se van a dividir en becas de maestría, de universidades, gobiernos locales y becas especiales que el gobierno de China ofrece a los estudiantes internacionales. Pero, además de estas becas, que entran en el ámbito federal, muchos mexicanos vienen a China apoyados por acuerdos de universidades estatales o por interés propio. Solo en Beijing están 150. Una de las metas que nos hemos fijado, y para esto va a ser importante la reunión de la comisión binacional México-China, que tendrá lugar en 2014, es cómo podemos dar un paso más hacia adelante para aumentar el número de mexicanos estudiando en China y el número de chinos estudiando en México. Lo primero que acordamos es que la relación México-China no se acaba en la dimensión económica, que es una relación madura, heterogénea, compleja, que tiene vertientes y áreas de oportunidad en todos los ámbitos. En ese sentido, hay una decisión explícita de fortalecer la presencia cultural de China en México y de México en China.
CH: Cinco meses después de la visita de Xi Jinping a México ¿qué aspectos destacaría usted del estado actual de las relaciones entre China y su país?
JV: Yo destacaría que estamos en un momento óptimo, en una coyuntura muy promisoria. Los contactos entre los presidentes han desatado una verdadera ola de intercambios y contactos al más alto nivel. No solo los presidentes se han reunido en un espacio de tiempo muy corto, sino también cinco ministros mexicanos han estado en China, desde junio. El gobernador de Chihuahua acaba de realizar una visita muy exitosa, la emana pasada, a Beijing y a Chongqing –primer gobernador que realiza una visita desde que tuvo lugar la visita de Estado del presidente Xi a México. En fin, creo que la meta es ambiciosa, que la densidad de nuestros vínculos podría ser mayor, pero estamos construyendo una plataforma de acercamiento, que nos coloca en una situación privilegiada, en un momento en que China y México están consolidando su posición como actores globales de mucho peso en el escenario internacional.
Por Wu Kai y Pedro Lago