Precandidatos y partidos se preparan para el 2012
Por Lic. Mauro Jiménez Lazcano,
Director General de Macroeconomía
Sorpresivamente Andrés Manuel López Obrador abrió su precandidatura presidencial para el 2012, con un mitin en el Zócalo lleno; ahí dió a conocer los principios básicos de su programa y señaló que no esperaría a las famosas encuestas de último momento, porque sabe que siempre podrían estar manipuladas.
Ese adelantamiento de Andrés Manuel López Obrador empujó a los otros precandidatos y partidos a salir a la palestra, siendo el primero en ello Enrique Peña Nieto, del PRI, quien encabeza las encuestas de los precandidatos de ese partido y, de hecho de todos los precandidatos, ya que la mayor parte de las encuestadoras reconocidas le dan ahora entre el 40 y 50 por ciento (Mitofsky) de las intenciones actuales de voto, si hoy fueran las elecciones presidenciales.
Pero, como es natural, otros precandidatos del PRI como Manlio Fabio Beltrones, actual líder del Senado por la bancada priísta; Fidel Herrera Beltrán, Gobernador de Veracruz, y Beatriz Paredes Rangel, Presidenta del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, también se han agitado y se han lanzado a promover sus imágenes políticas para participar en la contienda interna de su partido.
MARCELO CONTRA “EL PEJE”
Cuando le preguntaron los periodistas a Marcelo Ebrard si asistiría al mitin al que había convocado “El Peje” López Obrador en el Zócalo, para el domingo 25 de julio, el Jefe de Gobierno Marcelo Ebrard contestó seca y bruscamente: “¡Nada tengo que hacer ahí!”.
Esta frase contundente y que se convirtió en un hecho real, porque no asistió Ebrard a la asamblea obradorista, señalaba con claridad un rompimiento entre los dos políticos o más bien, el rompimiento de Ebrard con el “El Peje”.
El hecho de que el mitin lopezobradorista fuera tan numeroso y exitoso, como fue, hizo que Ebrard reculara y convocara poco después a López Obrador a una comida de avenimiento.
Aparentemente las aguas regresaron a su cauce entre Ebrard y “El Peje”, pero “Los Chuchos”, que son los que mandan en la estructura del PRD permanecen contrarios a López Obrador y le harán la vida imposible en el futuro a tal grado de evitar que López Obrador sea el candidato de ese partido, por lo cual a este último no le quedará más remedio que ser Candidato Presidencial por el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Convergencia (Dante Delgado-Luis Walton).
A la dirigencia actual del PRD encabezada por “Los Chuchos”, no le quedará otro remedio más que esperar a que Ebrard sea el Candidato Presidencial de esa facción política o, en su defecto, Carlos Navarrete, Senador, porque ni Lázaro Cárdenas Batel podría ser ahora el candidato del PRD ya que se ha abierto una disputa conceptual y de conductas entre “Los Chuchos” y Cuauhtémoc Cárdenas, el fundador del partido, quien ha recriminado a aquéllos por haber olvidado los principios de su partido, al aliarse con el PAN en varias entidades; un partido de derecha que surgió para combatir al gobierno de su padre, el General Lázaro Cárdenas, en el año 1939.
EL PAN NO ENCUENTRA UNA FIGURA
Por su lado el PAN no ha podido encontrar una figura que cubra los requisitos de una precandidatura presidencial sólida y viable: el que más intención de voto tiene en el país es Santiago Creel (14%), pero da la casualidad que no es santo de la devoción de Calderón y por ello su designación parece imposible; la señora Josefina Vázquez Mota, ex Secretaría de Educación y también de la Sedesol, tiene un origen foxista, razón por la que tampoco entraría en los planes de Los Pinos, así que el PAN se queda, por el momento, con dos cartas abiertas: Alonso Lujambio, actual Secretario de Educación y Ernesto Cordero, Secretario de Hacienda, que son del agrado de Calderón, quien los impulsa.
Alonso Lujambio y Ernesto Cordero son dos tecnócratas de corte parecido, aunque Lujambio tiene ángulos más políticos y Cordero en cambio, tiene ángulos más matemáticos, por ser un actuario enfocado ahora a las finanzas.
¿ALIANZA PAN-PRD PARA LA GRANDE?
Aunque algunos sectores del PAN se opondrían a una alianza con el PRD para la Grande del 2012, en los círculos políticos llega a hablarse de esa posibilidad, a pesar de que los dirigentes panistas de la cúpula lo nieguen ahora, con el pretexto de que esa alianza cuando más sería para el Estado de México en el 2011.
Como el PAN no encuentra la figura de un candidato ganador por el momento, algunos “aliancistas” piensan que podría ser Ebrard el Candidato de la alianza PAN-PRD: “Eso sería mejor que perder”, señalan algunos panistas audaces; o sustituyen la figura de Ebrard por la de Juan Ramón de la Fuente, que sería un candidato ciudadano apoyado por la alianza PAN-PRD, similar a la de Oaxaca.
La mentalidad de quienes están pensando así es porque ven muy difícil que el PAN solo o el PRD solo, o “El Peje” mismo puedan ganarle la delantera a Enrique Peña Nieto, que les lleva por el momento una ventaja enorme en la opinión pública y en la formación de una imagen ganadora para el 2012.
Muchas cosas habrá de ver próximamente la ciudadanía mexicana, porque el PAN y Los Pinos no quieren considerar todavía el escenario donde recupere la Presidencia el PRI con Peña Nieto.
PANORAMA NACIONAL COMPLICADO
Los precandidatos mencionados y otros que surgirán o que ya se les menciona tienen a la vista un panorama nacional muy complicado y violento, que sólo podría enfrentar alguien que a la vez tenga mano dura y diálogo político; alguien que sepa mandar a las fuerzas armadas, tanto militares como civiles y que a la vez pueda penetrar en la sociedad para hablar con estudiantes, maestros, campesinos, obreros, sindicatos, agrupaciones sociales, organizaciones no gubernamentales.
Se necesitará un hombre de acción o una mujer de acción capaz de enfrentar cara a cara los problemas, abiertamente, con sinceridad política, capaz de recibir la confianza y la credibilidad de la población y sus sectores.
De los que se mencionan, varios de ellos estarían en la capacidad de tomar las riendas del país pero requerirán decisión, honradez, inteligencia, valor y sobre todo un deseo verdadero de servir a la nación más allá del enriquecimiento familiar o personal.
LA POBLACION ESPERA
CAMBIO DE RUMBO
Dentro de un panorama político, económico y social de crisis, donde el asunto de la seguridad pública ha tomado prioridad, la población espera que las condiciones del país cambien para bien, en materia de seguridad, y economía; los ciudadanos esperan que la crisis del desempleo termine y se resuelva, que haya trabajo, para los jóvenes y que la violencia tenga un fin cercano.
Mucha gente considera que un cambio de aires será benéfico para el país; pero para ello, los precandidatos deberían avocarse a la construcción de una plataforma política, social y económica creíble y factible; y, sobre todo, rodearse de un equipo capaz y honrado, eficiente para hacer que el país vuelva a la ruta del crecimiento.