La Comisión Federal de Electricidad (CFE) es una de las mayores entidades públicas en México y la segunda más grande en términos del presupuesto asignado para sus adquisiciones, con más de 300 unidades compradoras en todo el país. Sus gastos de adquisiciones representan prácticamente el 20% de todas las adquisiciones federales.
La CFE se encuentra en un momento clave en su larga historia. La reforma energética de 2013 abrió las actividades de generación y distribución de energía eléctrica a la inversión privada, obligando a la CFE a buscar eficiencias y ahorros en sus costos para responder a la creciente competencia que se enfrentará en el futuro cercano entre competidores nacionales y extranjeros.
En 2013, la CFE solicitó a la OCDE y a la autoridad de competencia mexicana (COFECE) para revisar sus prácticas de contratación a la luz de la Recomendación de la OCDE de 2012 sobre la lucha contra la colusión en los procesos de contratación pública y de los lineamientos afines.
El presente informe incluye una visión general de la contratación pública en México y en la CFE, y un resumen del marco legal aplicable a la contratación pública en el país. Contiene también recomendaciones para la CFE que pueden ayudarla a mejorar sus prácticas de contratación y lograr el ahorro y las eficiencias necesarias para asegurar su éxito continuo en un entorno cada vez más competitivo.
El informe resultante incluye una visión general de la contratación pública en México y en la CFE, un resumen del marco legal aplicable a la contratación pública en el país y recomendaciones a la CFE para mejorar sus prácticas de contratación y lograr el ahorro y la eficiencia necesarias para asegurar su éxito continuo en un entorno cada vez más competitivo.
Principales conclusiones y recomendaciones
El Informe reconoce que la CFE siempre ha sido una entidad innovadora en esta área y siempre se ha esforzado por mejorar sus procedimientos de compra más que cualquier otra institución pública en el país. Sin embargo, el informe identifica áreas importantes susceptibles de mejora:
Los funcionarios de adquisiciones de la CFE deben diseñar mejores estrategias de compra, recopilar y sistematizar más y mejor información, y obtener un mejor entendimiento respecto de cómo la colusión puede detectarse mediante la identificación de señales de advertencia durante el proceso de licitación.
La CFE debe priorizar los esfuerzos para mejorar los estudios de mercado y hacer que esta información sea más accesible a los funcionarios de adquisiciones. Para ello, el informe recomienda que la CFE construya una base de datos robusta en materia de contrataciones con información histórica así como crear una unidad especializada para elaborar estudios de mercado, dedicada a supervisar y coordinar esta importante fase del proceso de adquisición.
la CFE debe llevar a cabo análisis de costo-beneficio sobre los procedimientos de adquisición que ha realizado en el pasado para determinar las mejores estrategias para la adquisición de distintos bienes y servicios.
También se recomienda incrementar el diálogo con los proveedores, siempre y cuando no se intercambie información sensible y estratégica, pues esta información podría ser utilizada por los oferentes para coordinar su comportamiento durante las licitaciones y facilitar acuerdos colusorios.
Otras recomendaciones importantes incluyen: una mejor gestión del flujo de información hacia terceros para evitar que se revele información sensible de forma innecesaria; expandir los esfuerzos para consolidar las compras y lograr un mejor aprovechamiento de los contratos marco; la adopción de prácticas para aumentar el número de oferentes; la implementación de un enfoque estricto para aceptar ofertas conjuntas; limitar el abastecimiento simultáneo e impedir el uso de la subcontratación con efectos anticompetitivos.
El informe de la CFE fue presentado en la ciudad de México el 7 de enero de 2015. El Secretario General de la OCDE, Ángel Gurría asistió a la ceremonia de lanzamiento del informe.