2011: año de definiciones
Este año de 2011 ha iniciado con una intensa actividad política, por la que se irán definiendo las posiciones de los partidos y las postulaciones presidenciales necesarias, tanto de la derecha como del centro y de la izquierda.
Si empezamos por la izquierda, podría decirse que está dividida fundamentalmente en dos: el ala del PRD encabezada por los “Chuchos”, cuyo candidato visible sería Marcelo Ebrard Casaubon, actualmente Jefe de Gobierno del Distrito Federal; y, por el otro lado, quedaría Andrés Manuel López Obrador, postulado por el Partido del Trabajo y probablemente por el Partido Convergencia, así como por una parte del PRD “no chuchista”.
Sin embargo, para la izquierda Mexicana queda todavía la opción del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, fundador del PRD y dirigente respetado por tirios y troyanos, y que estaría en posibilidad de lograr la unidad entre las dos grandes fracciones izquierdistas, a las que nos referimos líneas arriba.
Con todo, el mismo ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano no ve todavía, en los momentos actuales, que existan condiciones para su postulación, ni dentro ni fuera de su partido, el PRD.
Sin embargo, si hubiera un grado de cordura e inteligencia política en los militantes y dirigentes del PRD, la postulación del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, le daría congruencia y unidad a ese partido, y una posibilidad real de ir por el triunfo, como ya lo obtuvo en 1988.
En otro partido, el PRI, del centro, las posibilidades de postulación se abren para Enrique Peña Nieto, actualmente gobernador del Estado de México, quien terminará su mandato en septiembre próximo, y quedaría en aptitud de ser postulado directamente en el siguiente mes de octubre o de noviembre, según los tiempos de ese partido; pero se tendrán que considerar a otros prospectos, particularmente al senador Manlio Fabio Beltrones, quien también tiene posibilidades amplias de llegar.
El PRI, según las encuestas especializadas, tiene posibilidades de obtener el triunfo electoral en el 2012, en caso de que mantenga una línea de conducta seria, que permita al país a avanzar, ya que al momento tiene el control del Congreso de la Unión, así como de la mayoría de las gubernaturas de los Estados: 18 entidades, que son un número mayor a los que tienen combinados el PAN y el PRD.
El PAN, por su parte ha visto disminuida su votación en los últimos tiempos, como fue notorio en la reciente elección de gobernador en el Estado de Guerrero, donde obtuvo alrededor de un 2%, que lo puso en riesgo de perder su registro en esa entidad; sin embargo, ha buscado el triunfo electoral por otros caminos, en alianza con los partidos izquierdistas, que antes abominaba, como son el PRD, Convergencia y el PT, a los que se alió en Oaxaca y triunfó con Gabino Cué al frente, un ex priísta y ex convergente; y en Sinaloa, donde el PAN se alió al PRD, pero llevando como abanderado a un senador del PRI, Mario López Valdés, (Malova), dirigente priísta que se vio obligado a jugar contra su partido por razones políticas.
Y en Puebla, donde el PAN, en alianza con los partidos de izquierda también ganó, llevando a la cabeza a Rafael Moreno Valle, donde quedó derrotado, por sus propios errores el ex Gober Precioso.
En los círculos políticos se sabe que el PAN está indeciso sobre a quien postulará para la Presidencia de la República hacia finales de este año.
El PAN tiene a varios y a ninguno: a Santiago Creel, que no es del gusto de Los Pinos ni del mando panista actual; a Gustavo Madero, Presidente en turno del partido y senador, con muchas aspiraciones; Josefina Vázquez Mota, dirigente de la bancada de la diputación federal panista; Ernesto Cordero, actualmente Secretario de Hacienda, a quien los analistas ven como el delfín de Felipe Calderón; a Alonso Lujambio, Secretario de Educación, quien da el perfil de un buen candidato y ha aceptado que quiere participar en la lid electoral presidencial y hasta se ha llegado a mencionar al ex Candidato Presidencial y ex “Jefe” Diego, Diego Fernández de Cevallos, para quien, las secuelas de su secuestro son ahora un freno, por si tuviera aspiraciones.
Este es el año de las definiciones políticas para los partidos y sus aspirantes; será muy importante para la nación que todos ellos mantengan un sentido patriótico y de servicio a la población.
México merece salir de la grave situación en que se encuentra y retomar el camino de progreso con seguridad pública y paz social, dentro de un marco de vigencia plena del Estado de Derecho.
Que haya buena suerte para partidos y candidatos y que haya buena suerte para el País. México merece un futuro mejor.