Tiempos de guerra; fin de la globalización

Señor David Bortulussi, Presidente del Club Toastmasters RI 4170 Queridos amigos y colegas Toastmasters

Para las personas de mi generación, mujeres y hombres que nacimos durante la Segunda Guerra Mundial o en la Postguerra que siguió, los tiempos de guerra que ahora vivimos nos hacen recordar las atrocidades de aquellos tiempos, en que la humanidad se vio envuelta en un conflicto internacional que costó la vida a 60 millones de seres humanos.

Aquella guerra que se desarrolló en Europa, y el norte de África, en Japón y el Sureste Asiático, terminó con el lanzamiento de dos bombas atómicas y destrucción de las ciudades de Hiroshima y Nagasaki.

Tal vez por eso, a quienes vivimos en una forma u otra las repercusiones de esos conflictos bélicos, nos conmueve tanto y nos preocupa lo que está ocurriendo ahora en Europa y el nuevo enfrentamiento internacional causado por la invasión de Rusia a Ucrania, situación que ahora implica prácticamente a todos los países del orbe y que puede terminar en una Tercera Guerra Mundial, mucho más mortífera que la anterior, puesto que podrían usarse decenas o centenas de bombas nucleares que actualmente ya están montadas en misiles listos para dispararse.

Este conflicto, que empezó por la ambición fantasiosa de reconstruir el Imperio Soviético, por el actual Presidente ruso Vladimir Putin, podría terminar de la peor manera para la civilización humana.

Por lo pronto se ha puesto fin a la globalización económica que se había establecido y que permitía el flujo de bienes y servicios, a través del comercio y los medios más avanzados de comunicación y traslado de valores

financieros a la velocidad de la luz mediante redes en el ciber espacio, ha resentido ya cortes profundos que afectan gravemente el comercio y las finanzas internacionales y que están creando nuevos fenómenos de escasez de energéticos, alimentos y también inflación, que amenazan a las naciones tanto a las más adelantadas como a las de mayor atraso, que regresarán, estas últimas, a situaciones producidas por el hambre, la necesidad y la enfermedad.

Las sanciones económicas y financieras impuestas por los países de occidente a Rusia, tienen como respuesta la suspensión de abastecimientos de petróleo y gas que se trasladaban en grandes cantidades desde los campos de producción rusos a las naciones de Europa.

Todo ello se ha conjugado para crear nuevas condiciones en la economía internacional en que la inflación y los males que conlleva serán una constante.

Nuestro país, México, no es una isla y aunque permanece como nación neutral en el conflicto bélico y económico internacional, está resintiendo ya efectos muy negativos en su economía, y los daños ulteriores podrán ser mayores.

A nosotros, los ciudadanos mexicanos nos concierne mantenernos informados y activos para colaborar a la solución de los problemas planteados hasta ahora y a los que vendrán; es necesario que nos mantengamos unidos dentro de nuestras familias, en nuestros empleos y centros de producción, en nuestros clubes y asociaciones y como integrantes de esta gran nación en que nos ha tocado nacer y vivir, defendiendo siempre la libertad y la democracia que tanto ha costado a nuestros padres y a nosotros establecer como un modo de vida.

LIC. MAURO JIMENEZ LAZCANO Rotario Toastmaster