Presenta el Presidente Enrique Peña Nieto el Programa Nacional de Infraestructura 2014-2018; prevé una inversión global de 7.7 billones de pesos
El Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, encabezó la presentación del Programa Nacional de Infraestructura 2014-2018, que prevé una inversión global de 7.7 billones de pesos; es decir, 7.7 millones de millones de pesos, y es “la hoja de ruta que ya guía nuestros esfuerzos para edificar el México moderno y competitivo que queremos todos los mexicanos”.
Señaló que “el desarrollo de infraestructura es una de las máximas prioridades del gasto público; es una de las decisiones de gobierno más trascendentes para detonar el crecimiento del país y mejorar la calidad de vida de todos los mexicanos”, pues actualmente, no obstante el esfuerzo de varias generaciones, “la infraestructura que tenemos aún es insuficiente para el tamaño e importancia económica de México”.
Subrayó que el Programa Nacional de Infraestructura “es la estrategia general para construir las obras y concretar los proyectos que contribuyan de manera importante a liberar el potencial de nuestro país”.
El Primer Mandatario indicó que con las obras del Programa Nacional de Infraestructura “estamos cambiando el rostro de México y construyendo juntos, literalmente, un mejor futuro para todos”. En esta administración, continuó, “ya hemos iniciado una nueva era en la construcción de grandes obras y el desarrollo de proyectos estratégicos en toda la geografía nacional”.
Apuntó que al concluir esta Administración “queremos una nación mejor comunicada, con carreteras en buen estado y autopistas de altas especificaciones en los ejes troncales; con tránsito vehicular más fluido en las grandes ciudades, gracias a libramientos, distribuidores viales y segundos pisos. Escribiremos un nuevo capítulo en la historia del transporte en nuestro país, con modernos trenes de pasajeros conectando a nuestras ciudades; con buques de gran calado zarpando de puertos de clase mundial; y con más vuelos comerciales, despegando de aeropuertos renovados”.
Será un México, continuó, “con acceso generalizado a internet de alta velocidad; con mejores servicios de telefonía, televisión y radio, apoyados por modernos satélites. Tendremos pozos petroleros en aguas profundas; instalaciones para explotar el gas shale; modernas hidroeléctricas y plantas de ciclo combinado, así como extensos gasoductos llevando gas natural a los principales centros industriales. Será un México con mayor acceso a servicios de salud; con ciudades que aseguren servicios básicos a todos sus habitantes; con renovados centros turísticos que fomenten el desarrollo regional”.
Éste es el México moderno, dinámico y de progreso que veo, y es el México que juntos ya estamos construyendo, destacó.
El Presidente Peña Nieto aseguró que el Programa Nacional de Infraestructura 2014-2018 tiene un enfoque integral, transversal y social, en el que por primera vez se incluyen seis sectores estratégicos que cuentan, cada uno, con un monto de inversión total y un objetivo general: Comunicaciones y Transportes; Energía; Hidráulico; Salud; Desarrollo Urbano y Vivienda; y Turismo.
Precisó que el Programa Nacional de Infraestructura “también promueve el desarrollo de cada región, con acciones específicas y diferenciadas para el norte, centro y sur-sureste de México”. Como ejemplo, citó que en la región sur-sureste se impulsarán “189 proyectos con una inversión de prácticamente 1.25 billones de pesos, para detonar su potencial turístico, agropecuario, energético e industrial, así como para fortalecer su conectividad”.
Añadió que “sin considerar los proyectos de alcance nacional, ésta es la región donde realizaremos el mayor gasto de inversión en proyectos estratégicos para aumentar las oportunidades de superación y mejorar la calidad de vida de todos sus habitantes”.
Puntualizó que, “a pesar de ser la décimo cuarta economía del mundo, en calidad de infraestructura ocupamos el lugar 64 entre 148 países, de acuerdo con el Índice Global de Competitividad del Foro Económico Mundial”.
Explicó que “la experiencia internacional es clara: a mayor y mejor infraestructura, hay más oportunidades de atraer inversiones productivas, generar empleo y mejorar los ingresos de las familias”.
Seis sectores estratégicos del Programa Nacional de Infraestructura 2014-2018
El Presidente de la República agregó que el Programa Nacional de Infraestructura considera inversiones, en materia de Comunicaciones y Transportes, por más de 1.32 billones de pesos. El objetivo en este rubro es “contar con una infraestructura y una plataforma logística modernas, que fomenten una mayor competitividad, productividad y desarrollo económico y social”.
“Queremos consolidar a México como un gran centro logístico global de alto valor agregado. Para ello, se aprovechará de manera integral su privilegiada ubicación geográfica, su amplia y creciente red de Tratados de Libre Comercio, así como su probada capacidad exportadora de calidad mundial”, resaltó.
Para ilustrar la trascendencia de este rubro, mencionó algunos proyectos considerados: los trenes de pasajeros México-Querétaro y México-Toluca, así como el Tren Transpeninsular, en Quintana Roo y Yucatán. Igualmente, la ampliación del Tren Eléctrico de Guadalajara y el Metro de Monterrey. También se concretarán diversos proyectos ferroviarios para el transporte de mercancías, entre otras obras.
Precisó que para cerrar la brecha digital entre los mexicanos, se respaldará la instalación de una red nacional compartida de banda ancha; el acceso universal a Internet en 250 mil espacios y sitios públicos; y la operación plena del Sistema Satelital Mexsat.
En materia de Energía, añadió, se prevén inversiones por prácticamente 3.9 billones de pesos. El objetivo es generar la infraestructura necesaria, para “contar con energía suficiente, de calidad y a precios competitivos”.
Entre las acciones previstas, destacan las inversiones en recuperación mejorada de los campos petroleros de Ku-Maloob-Zaap y Cantarell, en costas de Campeche; y para aumentar la capacidad productiva en la Cuenca de Burgos, en Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas. Para darle mayor valor agregado a nuestros productos petroleros y reducir la dependencia del exterior, se acelerará la modernización de las refinerías de Madero, Minatitlán, Salamanca, Salina Cruz y Tula. Igualmente, a fin de garantizar el abasto de gas natural a la industria nacional y a las plantas generadoras de electricidad, se desarrollará un Plan Nacional de Gasoductos.
Indicó que con respecto a la generación de electricidad, se impulsarán todas las fuentes de energía. Destacó la construcción de una planta de ciclo combinado, en Nuevo León; dos hidroeléctricas, en Chiapas y Nayarit; seis centrales eólicas, en Oaxaca; y 16 campos solares, en el norte del país.
En materia de Infraestructura Hidráulica, el Presidente Peña Nieto afirmó que la inversión prevista rebasa los 415 mil millones de pesos. El objetivo, mencionó, es “incrementar la infraestructura hidráulica, tanto para asegurar agua destinada al consumo humano y riego agrícola, como para saneamiento y protección contra inundaciones”.
En este marco, apuntó, “se construirán obras como la Tercera Línea de Conducción del Sistema Cutzamala, en beneficio de los habitantes del Valle de México; el Acueducto Monterrey VI; y el Proyecto El Zapotillo, este último en apoyo de León, Guanajuato. También destaca la construcción de presas, como la de Santa María, en Sinaloa; plantas desalinizadoras, en Baja California Sur; o el Canal Centenario, en Nayarit. Además, se concluirán las obras del Túnel Emisor Oriente y del Plan Hídrico Integral de Tabasco, para reducir el riesgo de inundaciones catastróficas en el Valle de México y en la ciudad de Villahermosa, respectivamente. Se contemplan también múltiples plantas de tratamiento de aguas residuales, en las que sobresale la de Atotonilco, en el Centro del país.
En el renglón de Salud, se prevén inversiones por un monto de 72 mil 800 millones de pesos. El objetivo es “contribuir a fortalecer y optimizar la infraestructura interinstitucional en salud, para garantizar el acceso efectivo a servicios de salud con calidad”.
En este propósito, dijo, “se fortalecerá la infraestructura en los tres niveles de atención. Destaca la ampliación del Hospital General de México y la construcción de la nueva torre de hospitalización del Instituto Nacional de Cancerología, en el Distrito Federal; así como la edificación de hospitales regionales de alta especialidad y generales. Igualmente, el IMSS y el ISSSTE construirán hospitales en distintas entidades del país”.
En Desarrollo Urbano y Vivienda, se prevén inversiones por más de 1.8 billones de pesos. El objetivo es “impulsar el desarrollo urbano y la construcción de viviendas de calidad, dotadas de infraestructura y servicios básicos, con el acceso ordenado del suelo”.
Y finalmente, en materia de Turismo, se prevén inversiones por más de 180 mil millones de pesos. El objetivo es “desarrollar infraestructura competitiva, que impulse el turismo como eje estratégico de la productividad regional y detonador del bienestar social”.
Con ese fin, indicó, “se ampliará y actualizará la infraestructura turística del país. Se brindará especial atención al fortalecimiento de los Centros Integralmente Planeados del Pacífico, al rescate de playas y centros históricos, así como a la consolidación de nuestros pueblos mágicos. En el rubro turístico, sobresale el desarrollo de Centros Integralmente Planeados, en las zonas arqueológicas de Calakmul, Chichén Itzá, Palenque y Teotihuacán”.