Por Alberto Jiménez Mora y Alarcón
Nacida en Buenos Aires, Argentina, esta gran artista se convirtió en una gran embajadora del arte de la Riviera Maya, conquistando los sentidos a través de su pintura.
En la sección de MUJERES AL PODER, Marcela López, lo primero que destaca, “ser mexicana, pero por decisión y por corazón, me considero mexicana. México me ha adoptado con su calidez, su cultura, y su gente, y aquí he encontrado mi hogar y una profunda conexión que ha enriquecido mi vida y mi arte.”
SUEÑOS DE NIÑA
Agrega que “desde niña, mis sueños estaban llenos de anhelos de paz y libertad, ya que crecí en un entorno que me planteó muchos desafíos. Soñaba con vivir cerca del mar, rodeada de naturaleza, y dedicarme plenamente al arte. Sin embargo, la realidad ha superado con creces mis sueños, porque jamás imaginé que existiría un lugar tan paradisíaco como la Riviera Maya. Aquí, no solo he encontrado el mar que siempre soñé, sino también un espacio donde mi arte ha florecido y donde cada día me siento más conectada con mi verdadera esencia.”
Con suma ternura recuerda que “desde mi infancia, me gustaba dibujar caras y diseñar vestidos y ropas. También amaba la danza clásica. Aunque no sabía lo que era pintar, siempre he sentido una profunda pasión por la creatividad. Desde que tengo uso de razón, siempre me he sentido artista.”
LA ADMIRACIÓN
Elegantemente vestida, afirma convencida “admirar profundamente a aquellos que, a través de su arte, logran trascender las barreras del tiempo y el espacio, revelando la esencia de la condición humana. Me inspiran artistas como Frida Kahlo, cuya valentía para explorar su propia vulnerabilidad y dolor transformó su vida en una obra de arte inmortal. También admiro a los maestros de la pintura clásica, como Caravaggio, cuyo uso revolucionario de la luz y la sombra cambió la percepción del arte en su época. La capacidad de estos artistas para desafiar las convenciones y expresar la profundidad del alma humana es una fuente constante de inspiración para mí.”
CONCEPTOS DE VIDA
Afirma que “mis conceptos de valentía y transformación que admiraba en artistas como Frida Kahlo y Caravaggio siguen siendo fundamentales en mi vida y mi trabajo. Su capacidad para explorar la vulnerabilidad y desafiar las convenciones inspira mi propia búsqueda de autenticidad en el arte. Para mí, el arte es una forma de expresión que trasciende los límites personales y culturales, y esos principios continúan guiando y profundizando mi práctica artística diaria.”
EL ENTORNO Y DESARROLLO HUMANO
Una de sus grandes pasiones “por la pintura me ha permitido conectar con la rica cultura mexicana, a la cual amo profundamente. Esta tierra me ha inspirado a crear y, al mismo tiempo, me ha dado la oportunidad de retribuir apoyando varias causas sociales que me tocan el corazón. A través del arte, encuentro una forma de contribuir y generar conciencia, fusionando mi talento con mi compromiso hacia la comunidad.”, destacó emocionada.
Esta atractiva artista expresa que “para que el ser humano se desarrolle plenamente, creo que es esencial fomentar una integración equilibrada de la introspección y la conexión con el mundo exterior. El desarrollo personal requiere un compromiso con el autoconocimiento y la auto aceptación, permitiendo que cada individuo explore sus propias emociones y aspiraciones. Al mismo tiempo, es crucial cultivar la empatía y la comprensión hacia los demás, promoviendo un entorno de apoyo mutuo y colaboración. En última instancia, el crecimiento humano se nutre de la combinación de introspección profunda y la construcción de relaciones auténticas que enriquezcan la experiencia de vida.”
Marcela López, comenta entusiasta que “en el futuro, me vislumbro llevando mi mensaje de sanación y resiliencia a través de mi libro, con el deseo de tocar corazones y animar a las personas a romper paradigmas y seguir sus sueños. Quiero que mi arte y mis palabras sirvan de inspiración para superar desafíos. Además, quiero seguir evolucionando como pintora, dedicarme a la filantropía apoyando causas que me conmueven, y superarme cada día como persona.”
LA RIVIERA MAYA EN SU CONQUISTA
En el marco de esta conquista , “la Riviera Maya me habla de contrastes vivos: el azul profundo del mar contra el verde intenso de la selva, la textura ancestral de las ruinas mayas en diálogo con la modernidad. Es un espacio donde la naturaleza y la historia susurran constantemente, inspirando la conexión entre lo sagrado y lo contemporáneo.”, nos dijo convencida.
Agrega que “mientras las raíces mayas siguen palpables en su arte y tradiciones, veo cómo el turismo y el desarrollo han consolidado una economía vibrante. Este crecimiento invita a reflexionar sobre el equilibrio entre preservar la identidad cultural y aprovechar la solidez económica que atrae al mundo.”
Esta gran figura intelectual, proyecta que “mii pasión por la pintura me ha permitido conectar con la rica cultura mexicana, a la cual amo profundamente. Esta tierra me ha inspirado a crear y, al mismo tiempo, me ha dado la oportunidad de retribuir apoyando varias causas sociales que me tocan el corazón. A través del arte, encuentro una forma de contribuir y generar conciencia, fusionando mi talento con mi compromiso hacia la comunidad.”
LAS MUJERES EN LA ACTUALIDAD
Sobre la transformación que hay en el panorama actual, nuestra entrevistada afirma “las mujeres hoy somos una fuerza imparable. Hemos luchado durante años para ocupar un lugar merecido en la sociedad, no solo en el arte, sino en todos los ámbitos. Somos poderosas, resilientes, y nuestra voz es más fuerte que nunca. Cada paso que damos es un reflejo del esfuerzo colectivo por abrir camino para las generaciones que vienen.”
LA HERENCIA COMO HONOR
Con ese orgullo que la caracteriza, trasciende orgullosa que “definitivamente sí hago honor a mi apellido López a través de mi trabajo y mi vida. Vengo de una familia de inmigrantes que, con valentía y determinación, construyó una nueva vida en un nuevo país. Al igual que ellos, yo también empecé un nuevo capítulo al establecerme en México, un país que ahora considero mi hogar querido. El arte y mis acciones están inspiradas por la herencia, los valores de perseverancia y creatividad que mi apellido representa. Me esfuerzo por reflejar esa historia en mi trabajo y mi vida cotidiana, buscando siempre contribuir positivamente a la comunidad y honrar el legado de mis antepasados.”, declaró.
LOGRO Y HAZAÑA
Con esa sonrisa que le caracteriza, asegura que “mi mayor logro ha sido el poder transformar mis desafíos personales en una fuente de inspiración y crecimiento. Superar las dificultades y utilizar el arte como una herramienta de sanación ha sido una hazaña significativa para mí. Además, lograr que mi trabajo como pintora sea reconocido y valorado, y tener la oportunidad de compartir mi mensaje de resiliencia a través de mi libro, son logros que considero fundamentales en mi trayectoria. Cada paso en mi camino artístico y personal refleja mi compromiso con la superación y la autenticidad.”
VIRTUDES Y DEFECTOS
Mis virtudes incluyen mi capacidad para encontrar belleza y significado en el arte y mi resiliencia para superar obstáculos personales. Me esfuerzo por ser genuina y empática, lo que me permite conectar profundamente con los demás a través de mi trabajo y mi vida diaria. En cuanto a mis defectos, a veces soy demasiado autocrítica y perfeccionista, lo que me lleva a exigir mucho de mí misma. Además, mi pasión por lo que hago puede hacer que sea arriesgada y, en ocasiones, impulsiva, lo que puede generar desafíos en la toma de decisiones equilibradas. Estoy consciente de estos aspectos y trabajo constantemente para mejorar en cada área.”
Como una portadora de fe en su mundo, nos dice que, “me frustra la injusticia y la violencia que hay en el mundo, así como la desconexión que a veces sentimos entre las personas. Ver cómo estos problemas afectan a la sociedad y a los individuos puede ser desalentador, pero trato de enfocarme en cómo puedo contribuir a un cambio positivo a través de mi arte y mis acciones.”
SALUD, DINERO Y AMOR
Ante nuestro cuestionamiento sobre la numeración entre estos elementos, nos responde que “si tuviera que enumerar entre salud, dinero y amor, primero colocaría la salud, ya que sin ella nada más puede realmente funcionar. En segundo lugar, pondría el amor, porque es esencial para una vida rica y significativa. El dinero sería lo último, aunque reconozco su importancia para mantener una vida digna y construir nuestros sueños. No subestimo el valor del dinero, pero para mí, la salud y el amor son fundamentales y van primero.
SUS MÁS GRANDES AMORES
Con su gran sencillez, manifiesta que: “lo que más amo es a mi hijo, a mi hija, a mi perrita y a mis amigos, quienes llenan mi vida de amor y significado. Amo profundamente el arte, la vida misma, la naturaleza y mi México querido, que son fuentes inagotables de inspiración y gratitud para mí.”
LA ÚLTIMA
Como toda una guerrera, Marcela afirma: “soy la última en rendirme. Última en no mejorar, en no aprender, en no dedicarme a crecer, a crear y a evolucionar como ser humano, sobre todo. Mi compromiso es seguir siempre en movimiento, buscando siempre el crecimiento y la superación personal.”
MAYOR ORGULLO Y GRAN ATINO
De sus grandes atinos en la vida, lo destaca en: “mi mayor orgullo, que es haber logrado encontrar un equilibrio entre mi pasión por el arte y mi rol como madre, mientras enfrento la vida con una actitud positiva. Me siento satisfecha al ver cómo he podido superar desafíos, crecer y contribuir al bienestar de mi familia. También valoro profundamente el esfuerzo por ser lo más feliz posible con lo que nos toca vivir, apreciando cada momento y aprendiendo continuamente.”, finalizó esta gran dama quien posee no sólo el don de la belleza y personalidad, si no el encanto de lograr sus objetivos, transformando la vida de la sociedad, a través de su arte.
