La visión del HLED
Diálogo Económico de Alto Nivel entre EE. UU. y México
La Casa Blanca
9 de septiembre de 2021
El presidente de Estados Unidos Joseph R. Biden y el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador acordaron relanzar el Diálogo Económico de Alto Nivel entre EE. UU. y México (U.S.-Mexico High-Level Economic Dialogue, HLED) sobre la base del reconocimiento de la extensa relación económica estratégica que comparten ambos países. El HLED se creó en 2013 y promueve prioridades económicas y comerciales estratégicas para ambos países, con el objetivo común de favorecer el crecimiento y el desarrollo económico, la creación de puestos de trabajo, la competitividad global y la reducción de la pobreza y la desigualdad. La Administración Biden-Harris reconoce la importancia de la relación comercial dinámica, profunda e integrada con México, que actualmente representa nuestro mayor socio en lo que respecta a la comercialización de bienes, incluso como mercado primordial para las exportaciones agrícolas estadounidenses. A medida que nuestros países enfrentan nuevos desafíos, el HLED nos permitirá reconstruirnos y crecer como socios dinámicos.
El nuevo HLED se apoya en cuatro pilares fundamentales:
Reconstruir juntos
Promover el desarrollo económico y social sostenible en el sur de México y América Central
Asegurar las herramientas para la prosperidad de cara al futuro
Invertir en nuestra gente
Actuando juntos, podremos recuperarnos del impacto de la pandemia global, fomentar las inversiones y el comercio inclusivos, preparar a nuestros trabajadores para el futuro y fortalecer las cadenas de suministro regionales. Como foro permanente para abordar temas prioritarios, el programa del HLED se verá complementado a través de contribuciones periódicas y de la colaboración con actores clave de la sociedad civil y el sector empresarial.
Plan de trabajo del HLED
Pilar I: Reconstruir juntos
Estados Unidos y México se abocarán a la reconstrucción en forma conjunta en un contexto marcado por la pandemia, mejorando el entorno de negocios regional y reforzando la resiliencia de las cadenas de suministro entre ambos países. El trabajo en el marco de este pilar incluirá determinar cómo favorecer la recuperación económica y fortalecer la infraestructura, la facilitación del comercio y la innovación.
Fortalecer las cadenas de suministro que ya existen y las nuevas que se establezcan
Coordinar la acción respecto de industrias críticas con el fin de mitigar las perturbaciones en las cadenas de suministro.
Explorar oportunidades para complementar las necesidades en materia de cadena de suministro de ambos países, evaluando las posibilidades de lograr mayor competitividad, atraer inversiones y reducir las vulnerabilidades en sectores críticos.
Promover las tecnologías ambientales a través de intercambios de información y misiones comerciales.
Facilitación del comercio e infraestructura
Trabajar sobre la base de los principios de corresponsabilidad y cogestión de nuestra frontera común a través de la Iniciativa para la Gestión de Fronteras en el Siglo XXI.
Promover la competitividad económica entre Estados Unidos y México por medio de la innovación y mejorando los cruces de frontera terrestres y la infraestructura portuaria marítima, además de adquirir una mayor comprensión de los flujos comerciales transfronterizos y agilizarlos.
Mejorar el acceso a los dispositivos e insumos médicos para emergencias de salud pública.
Pilar II: Promover el desarrollo económico y social sostenible en el sur de México y América Central
Estados Unidos y México identificarán oportunidades de cooperación y complementariedad para mejorar los medios de vida a través de la creación de puestos de trabajo y oportunidades en el corto, mediano y largo plazo en El Salvador, Honduras, Guatemala y el sur de Mexico, incrementando así su potencial comercial y propiciando las inversiones.
Mayor cooperación técnica entre organismos de desarrollo internacional de EE. UU. y México, promoción de cadenas de valor, energía limpia y desarrollo rural.
Promover un mayor potencial comercial y favorecer las inversiones en la región identificando en forma recíproca los proyectos que sean de interés, a partir de investigaciones y análisis relevantes, lo que incluye investigaciones o misiones actuales o futuras que lleven a cabo ambos gobiernos.
Pilar III: Asegurar las herramientas para la prosperidad de cara al futuro
Estados Unidos y México se proponen favorecer la compatibilidad en materia regulatoria y la mitigación de riesgos con respecto a las tecnologías de la información y las comunicaciones, las redes, la ciberseguridad, las telecomunicaciones y la infraestructura, entre otras áreas.
Mitigar las amenazas y reforzar los flujos de datos
Generar oportunidades para fortalecer las protecciones de ciberseguridad en las cadenas de suministro globales. Facilitar la colaboración y la cooperación para hacer frente a los problemas de ciberseguridad a través de prácticas y estándares internacionales de la industria.
Intensificar los flujos de datos transfronterizos y la interoperabilidad entre Estados Unidos y México.
Pilar IV: Invertir en nuestra gente
Estados Unidos y México se proponen impulsar una cooperación que contribuya a mejorar la formación de la fuerza laboral y a que esta sea más competitiva y reciba mejor capacitación para adquirir las aptitudes que le permitan responder a las necesidades de la economía del siglo XXI.
Inclusión y capacitación.
Coordinar los esfuerzos conjuntos para promover el espíritu innovador.
Promover iniciativas para invertir en emprendedores y en pequeñas y medianas empresas (PyME).
Colaborar con el fin de ampliar el acceso a las oportunidades económicas para mujeres, jóvenes, personas indígenas y miembros de la comunidad LGBTQ+.
Evaluar opciones sobre programas conjuntos de formación y capacitación técnica en distintos sectores prioritarios.
El HLED fortalecerá nuestra alianza para cerciorarnos de que Estados Unidos y México estén a la altura de los desafíos de nuestra época y de que nuestros pueblos puedan prosperar. México y Estados Unidos mantendrán consultas periódicas con la sociedad civil, el sector privado, el ámbito académico y organizaciones no gubernamentales para contribuir al HLED, promoviendo un diálogo abierto que valore la inclusión y la diversidad de perspectivas y, al mismo tiempo, asegure la transparencia en la toma de decisiones.