La Bandera Nacional. Fusión de dos Imperios
Origen de los Colores Nacionales de México
Por Jesús Alberto Oliver Rodríguez
A la memoria de mi amigo el
Lic. Fausto Cantú Peña. QPD.
El pájaro Tzinitzcan como el quetzal, son animales considerados “solares” por los mesoamericanos precolombinos, ello explicado por su aparente cercanía al volar, parafraseando a Mircea Eliade con el “Altísimo”; de ahí la importancia de las plumas en los tocados de los indígenas pre americanos, como también de los alas de los ángeles del mundo cristinano; esta relación simbólica con el SOL, se observa en las imágenes hieráticas con aura solar en prácticamente todas las culturas y religiones del mundo desde Anatolia con Mithra, Aura Masda en Persia, Buda en la India, Inti entre los quechúas, Tonatiuh en el mundo náhuatl, a las imágenes de la religión cristiana, pasando por Grecia y Roma; la quipa hebrea, entre los ultraortodoxos, es un tocado que se utiliza todo el día en la parte superior de la cabeza, que puede ser su equivalente.
La reverencia SOLAR, en cualquier caso, es universal, principio de todo pensamiento mágico como científico.
Quetzal
La larga cola del quetzal “serpentea al volar”, de ahí la voz Quetzal-Coatl, la “serpiente emplumada”; ambas aves “solares”, están en el origen de los colores patrios; se aprecia su hermosa presencia en “las alas del angelito” que está a los pies de Guadalupe-Tonantzin y que representa el “poder terrenal”.
Fray Pedro de Gante el “maestro de América”, pariente de Carlos V de Alemania y I de España, fue el 1er franciscano en llegar en 1523 a Nueva España, asesoró desde su arribo en 1551, al sucesor de Fray Juan de Zumárraga (a) El Vizcayo, Fray Alonso de Montufar (a) El Granadino, 2º Arzobispo de México, para trabajar en el sincretismo Mariano, al punto de que decía que “él no era el arzobispo, que el verdadero era Fray Pedro de Gante”.
En la narración del Nican Mopohua de Antonio Valeriano en 1556, se dice que fue el trino melodioso del tzinitzcan, “el quetzal mexicano” que hace voltear a Juan Diego y ver así el prodigio. Pedro Infante en la película Tizoc, se refería a él como “zenzontle”…En 1648, será retomada la narración en el Huei tlamahuiçoltica para lanzar una campaña acompañada de estampitas del estamento criollo, representado pòr el bachiller Miguel Sánchez y traducido por el nahuatlato Luis Lasso de la Vega en 1649, tomándole como símbolo patrio local.
Agustín de Iturbide (a) “El Dragón”, tenía varios motivos en la invención del “Imperio Méjicano”, para pensar en los colores patrios, entre ellos el penacho color verde esmeralda de Moctezuma, ello para hacer frente de manera original a la influencia cromática tricolor con colores como el rojo, azul marino o celeste predominantes en las banderas francesa como de las revoluciones de la época en países de América del Sur.
Las alas del Ángel, símbolo del poder terrenal que está a los pies de la Virgen de Guadalupe-Tonantzín, sobre el que ella reina, son de color verde, blanco y colorado, como las del ave de la narración. Ella misma, en la parte posterior, tiene una imagen solar, muy utilizada en las imágenes hieráticas del mundo religioso, prácticamente desde el mesolítico.
Por su parte la Luna en cuarto creciente, sobre la que también reina, es de color “tenebrino”, por representar un culto precolombino no cristiano; representa a Tonantzin, advocasión lunar de Coatlicue, madre de todos los dioses del panteón mexica, por lo que la imagen presenta una Virgen María mesti-morena; de ahí, que así se le llame conforme a la narración de su aparición en el cerro del Tepeyac el cual está inserto en la sierra que más tarde será bautizada, en honor a la devoción por la virgen morena extremeña de Hernán Cortés, como Sierra de “Guadalupe”-Tonantzin, 2o mito fundacional, para exaltar conforme a la experiencia de la conversión musulmana en Espàña, del Granadino Fray Alonso de Montufar, las “ideas y reliquias” de los evangelizables para su evangelización, por ello, que sea este 2o arsobispo quién debe de pasar a la historia como el padre del sincretismo mexicano.
La bandera incorporó el 1er Mito fundacional de “pueblo elegido” diseñado por Tlacaélel, al triunfo de Tenochtitlán sobre Atzcapotzalco, recordando lo que nos recuerda la mítica Fundación de Roma, el ícono de una loba amamantando a Rómulo y Remo.
El águila es un ícono árido americano de Chicomostoc, origen mítico azteca (Códice Boturini) y la serpiente, representa la dieta que conformó su alimentación, cuando fueron confinados en aquel islote lleno juncos y serpientes, “bueno para morir” dijeron sus vecinos neolíticos, vecinos de la póligonal del lago, quienes les combatieron y aislaron por sus sanguinarios ritos paleolíticos tipo shoshone.
Así terminaron sus días los aztecas y surgió la grandeza mexica, como la hermosura y originalidad de la bandera nacional, fusionando íconos culturales de los dos imperios mas importantes de los 5 continentes en el siglo y medio que corre entre el siglo XV y el XVII, que hizo pasar con la mineria a la Nueva España de 500,000 km2 que alcanzó el imperio mexica, a 5 millones de kilómetros cuadrados, frontera con Rusia por Alaska y con China por Filipinas, fue un país con toda la barba, dependiente de España, no fue una colonia, concepto de cuño británico.
En Nueva España no hubo holocausto por España, como tampoco lo hubo con los hindus neolíticos de Bengala, India por los británicos; pero si se dió entre los colonizadores y las tribus originales de los Estados Unidos de Norteamérica, generado ahí sí, un choque cultural entre paleoliticos y neoliticos primero entre apaches y WASP, quienes inventaron con el asentamiento de las 13 colonias, el escalpelo de las cabelleras, en el siglo XVIII, para la retribución a su entrega, como muestra de exterminio por lo que requirieron de la importación población de África y después, por los Yankees en el siglo XIX, con la expansión al oeste y al sur, sobre Méjico, nada más de Cochise a Jerónimo (sonorense) en 25 años entre 1861 y 1886, se murieron 10 millones de “apaches”.
El entramado mestizo del mexicano medio del siglo XXI, no solo se refleja en su bandera, es cultural, racial, filosófico, conviven muchos grupos culturales diversos desde árido América hasta mesoamérica. En la gastronomía México ocupa una posición muy importante, relevante como muy apreciada internacionalmente junto con sus hoteleros, cocineros y chefs. En los EEUU, se puede saber si hay cocinero mexicano o no, si la comida es buena y los huevos fritos, estan o no, bien preparados.
La Bandera Nacional, logró integrar en un solo símbolo nacional, a sus dos grandes íconos fundacionales, el 1o Tenochca y el 2o Novo Hispano.
Aztecas o Mexicas. Cual es el gentilicio de la CDMX.