Por el Lic. Mauro Jiménez Lazcano,
Director General de la Revista Macroeconomía
La muerte de Ifigenia Martínez y Hernández es una gran pérdida para México; sus alumnos la extrañaremos por siempre; fue nuestra Directora en la entonces Escuela Nacional de Economía de la UNAM y nuestra maestra; trajo entonces, a principios de los años 50’s, las ideas nuevas de John Maynard Keynes, desde Harvard; entregó su vida y su sapiencia a nuestra Patria; su pensamiento vivirá siempre con nosotros.
Fue Ifigenia Martínez una mexicana ejemplar, intachable en su conducta; siempre amable y atenta con sus interlocutores; promovió el progreso de nuestro país y permanentemente sometió su acción a la razón.
Ejemplo para las mujeres mexicanas, Ifigenia Martínez será admirada por quienes la conocieron a lo largo de sus 99 años de edad, en que murió siendo nada menos que la Presidenta de la Cámara de Diputados y por ende Presidenta del Congreso de la Unión.
Su nombre brillará en los dinteles de las aulas de nuestra Universidad Nacional Autónoma de México.
