Fin de la era Bush; época de terror y depredación
Con el fin del gobierno de George W. Bush termina la época de “La Presidencia del Terror”, según la describió Jack Goldsmith, ex Fiscal General, de la Oficina del Consejero Legal de la Casa Blanca (W. W. Norton & Company, Inc., 2007. ISBN 978-0-393-06550-3), quien renunció a su cargo para no avalar las torturas y otros actos ilegales de ese gobierno.
También se pone jaque a “La Guerra de Un Trillón de Dólares”, según describieron Joseph E. Stiglitz, ganador del Premio Nóbel de Economía y Linda J. Bilmes (W. W. Norton & Company, Inc. 2008, ISBN 978-0393-06701-9), entendiendo aquí un trillón en inglés como equivalente a un billón en español.
Este enorme gasto en las guerras de Iraq y Afghanistán tendrá que considerarse como la causa más eficiente de la gran crisis económica y financiera a la que fue llevado el país de los Estados Unidos de América y su pueblo.
El repudio de que fue objeto George W. Bush al final de su mandato fue histórico: menos del 30% de la población norteamericana aprobaba su mandato el día de las elecciones presidenciales del 4 de noviembre de 2008.
Barack Obama arrasó en las elecciones más que por sus planteamientos y promesas, por el rechazo a que siguiera más tiempo la política de Bush, que infortunadamente representaba John MacCain.
UN PRESIDENTE NEGRO EN LA CASA BLANCA
El milagro se hizo el 4 de noviembre de 2008 y un negro fue elevado a la Casa Blanca; millares de personas se presentaron esa noche frente a los jardines de la sede del poder norteamericano y gritaron y bailaron durante toda la noche.
¡Fuera Bush! Ese era el grito y pedían también el fin de la guerra.
“Un negro en la Casa Blanca” parecía una profecía de Nostradamus y del Fin del Mundo. ¿Quién lo hubiera imaginado? ¡Todo el mundo se negaba a creerlo!
El filósofo francés Alain Tourain interpretó el desbordamiento del pueblo norteamericano por Obama como “la señal de que ese pueblo quiere regresar a una época de paz”.
Pero ¿podrá Obama cumplir las expectativas mundiales que ha creado y las expectativas que ha generado para su propio pueblo? Eso es algo que sólo el tiempo responderá, pero por lo pronto ha hecho renacer la esperanza de la Humanidad.
MUERE SAMUEL P.HUNTINGTON
Curiosamente, a finales de diciembre pasado (el día 24), murió el cientista político Samuel P. Huntington, autor del libro y el concepto de “Choque de Civilizaciones y la Reconfiguración del Orden Mundial” (The Clash of Civilizations and Remaking of World Order.- Simon & Schuster, Nueva York 1996.- ISBN: 84-493-0366-4), que planteó la lucha entre Occidente y el Islam, lucha que se materializó en gran parte durante el gobierno de George W. Bush; ahora, el mundo espera que con Barack Obama al frente de la Casa Blanca, se diluya y desaparezca eventualmente esa guerra que ha provocado tanto daño a la humanidad.
Con Barack Obama en la jefatura de la Casa Blanca termina un ciclo de lucha por la igualdad de los negros en Estados Unidos de América, que llevó a la Guerra de Secesión a mediados del siglo XIX, al asesinato de Abraham Lincoln, de Malcom X, de Martin Luther King y de cientos de luchadores sociales, blancos y negros, que sacrificaron sus vidas para hacer realidad la igualdad individual en los Estados Unidos de América.
El ascenso de Barack Obama a la Presidencia de los Estados Unidos de América, el 20 del mes en curso, significará también en el corto y mediano plazos, una modificación en las políticas sociales de aquél país y, sin duda, mejoramiento de las condiciones de vida e igualdad de los mexicanos que con documentos o sin ellos viven y trabajan en los Estados Unidos.
De la misma manera, la presencia de Barack Obama en la Casa Blanca significará la proyección de nuevas políticas hacia América Latina y, en particular, hacia México; es de esperarse una reedición del New Deal (el Nuevo Trato) Rooseveltiano de los años 30´s del siglo pasado.
La Humanidad espera mucho de Barack Obama y se alegra de la partida final de George W. Bush; se hacen oraciones en todo el mundo porque venga una nueva y larga era de paz y progreso para todos los pueblos de la tierra.