COPARMEX pide al Gobierno llegar a las últimas consecuencias en la estrategia del combate a la corrupción y el “huachicoleo”
La COPARMEX y su Presidente Gustavo De Hoyos prevé que el Gobierno sólo tiene una línea crítica de acción en su actual estrategia del combate a la corrupción y el “huachicoleo” de siete días más antes de que el efecto negativo de la acción gubernamental afecte de manera significativa en los productos y consumibles, aunado a una aplicación sin estigmatizar de todo el peso de la Ley a quienes participen del robo y comercialización de los combustibles.
Al hacer un balance de como están los empresarios procesando el tema del desabasto de combustibles el Presidente de la COPARMEX, señaló que han sido enfáticos que el principal reto que tiene el país es la fragilidad del Estado de Derecho, el mismo cumplimiento de la Ley y que los empresarios se pronuncian por un apoyo y respaldo a la decisión política del Presidente del combate frontal al flagelo y, sin embargo a pesar de la decisión adecuada, el proceso de comunicación ha sido desastroso.
“Nadie puede negar que ha habido una severa afectación primero a los ciudadanos, y en la medida que los días han ido pasando también a las operaciones productivas de las empresas; hoy tenemos afectaciones importantes que esperemos empiecen a quedar atrás, por ejemplo que nuestros trabajadores puedan llegar oportunamente a sus trabajos, hay afectaciones severas en la medida que el producto terminado pueda ser desplazado a los centros de distribución y de consumo”
“La capacidad operativa de las empresas esta fluyendo en base a las diferentes zonas y fuentes de trabajo; sería aventurado dar una cifra del retraso, a lo mejor si refiriéramos que de momento ha habido lugares que por ejemplo el jueves y viernes encontramos ausentismos críticos cercanos al 40 por ciento, en Guanajuato, en áreas industriales importantes”
“Lo cierto es que, estas medidas que respaldamos, tienen que ser mejor planeadas, lo que no se puede es arrancar un proyecto de ésta envergadura sin considerar incluso los peores escenarios, y prepararse con tiempo para que no haya un traslado de una afectación muy grave que decida el gobierno a una afectación muy grave a la población y a las empresas”.
“Por lo que respecta al respaldo de la acción y medidas al igual que la población y los empresarios de la COPARMEX nos pronunciamos por la aplicación del Estado de Derecho, sin embargo, no hay que compararlo con las críticas que no han sido claras, contundentes e inequívocas sobre la mala implementación de esto; los ciudadanos están poniendo por delante su interés del bien del país, su convicción de que se tiene que mejorar la situación del país”
“Combatir la ilegalidad y mantener la normalidad del ciudadano no son cuestiones incompatibles”
La estrategia de comunicación no adecuada, planteada de otro modo, veríamos que el 57 % podría haber sido del 95% de aceptación, si además de una buena decisión política hubiera habido una buena instrumentación adecuada; me parece que las personas que han mostrado algún grado de aversión precisamente es porque no están de acuerdo con la forma en que ésta fue instrumentada; sin embargo más allá de esto que ocurrió y fue muy grave, lo que hoy debemos de hacer es un llamado a las autoridades para que hagan lo que sea necesario para que se restablezca la situación”.
“Tenemos mucha preocupación, llamadas continuas por parte de nuestras empresas porque en algunos casos extremos las posibilidades de que sus unidades de transporte estén desplazando el producto que se va fabricando, se va elaborando, está siendo limitada; hay sectores muy sensibles como productos perecederos, como lo que son los medicamentos que si no se termina de regularizar la situación podrían llegar a afectar casos específicos en ciudades determinadas”.
“Ha habido un canal de comunicación que se ha centrado en sólo lograr el abasto, pero lo que debemos enfocarnos es a mediano y largo plazo que esta situación no se mantenga; por un lado el Estado mexicano debe de mantenerse combatiendo la ilegalidad con las fuerzas armadas, la policía, toda la capacidad del Estado; por otra parte es un llamado de atención muy importante para que se construyan más infraestructura y que hayan más fluidez para que los particulares estén participando en el almacenamiento y la distribución de combustibles; no digo que el Estado mexicano no va a cuidar lo que es suyo, pero también los particulares lo vamos a cuidar, así es que a raíz de esta medida el aprendizaje es permitir que de una manera muy transparente haya más elementos que puedan apoyar los procesos de distribución, nos aseguraremos que más allá de que existan esos grupos delictivos, los ciudadanos, las empresas tengan más oportunidades de donde encontrarnos combustible oportuno”
“Nosotros –COPARMEX– exigimos que no haya una sola línea de investigación que no se llegue a sus últimas consecuencias, han sido muy pocos los casos que se han dado a conocer de cuentas bancarias, de funcionarios, de empresas que podrían estar involucrados es este fenómeno; me parece que un evento de ésta magnitud, con éstas características, decir que con cuatro o cinco detenciones se esta llegando a toda la cadena delictiva, es francamente hablar de “cacahuates”, necesitamos que haya centenares de investigaciones abiertas, porque repito, un problema de ésta envergadura no se va a solucionar llevando solamente a tres o cuatro personas, es claro, que aquí hay muchos más funcionarios, muchos más políticos y eventualmente muchos más civiles involucrados en este problema”
¿Cuánto tiempo más cree que aguanten los empresarios esta situación, así como esta?, ¿Cuál es la ventana crítica de los empresarios?
Varia de industria a Industria y de región a región, pero tratando de establecer un promedio me parece que a partir de esta fecha, una semana, siete días más sería el punto de no retorno, donde muchas empresas podrían tener afectaciones ya de manera definitiva y sobretodo sus consumidores, es decir, es normal que las empresas se tengan producto terminado en promedio de diez o quince días para ser susceptible de ser entregado; en la medida que esta situación se prolongue por mas tiempo, ya podríamos ver que las empresas podrían estar en la incapacidad de llevar oportunamente sus productos a los centros de consumo y es lo que no queremos que pase bajo ninguna circunstancia; no queremos que ningún mexicano llegue al supermercado y no pueda encontrar como es normal en este país el producto que es de su elección”
“Yo espero que quienes diseñaron ésta estrategia, en la parte logística, en la parte de vigencia del Estado de Derecho, en la parte de cuidado a las instalaciones, hayan previsto que dada la envergadura de ésta acción, la delincuencia organizada iba a estar sin hacer nada, ojalá que se hayan tomado las medidas de estrategia, de inteligencia y logística para garantizar el éxito de esta operación; no quisiéramos que después de que se han dado pasos tan importantes en la dirección correcta, un relajamiento de la disciplina y que sino perder a las vencidas, dejarán de estar empujando para ganar esta gran batalla, hay que reconocer al Presidente la decisión de combatir la ilegalidad, sin embargo me parece que sus funcionarios en lo general deberían de tener un proceso de toma de decisión mucho más estructurado y considerar todos los escenarios y también para decirlo con claridad, comunicarlo de una manera más transparente a la sociedad, hemos visto como en los últimos días se ha dado una información muy zigzagueante, de repente se señalan unas cosas y luego se cambian las afirmaciones y bueno, esto lo que hace es mermar la confianza; ojalá que veamos total transparencia en la información por parte de los funcionarios de gobierno de tal manera que este apoyo que hoy afortunadamente tiene el Presidente se pueda incrementar”.
“Me parece que estigmatizar y decir que son empresarios los que están involucrados, no es lo correcto, aquí estamos hablando de ciudadanos de bien o de delincuencia organizada; si una persona participa en cualquier parte en el proceso, desde la extracción en campo, hasta la comercialización, hay que decirlo con claridad, es parte de la delincuencia organizada, no hay que hacer ninguna diferenciación, no importa si es un funcionario, es un comercializador, es un consumidor; nuestra exigencia es no estigmatizar a ninguna de. Los que están participando, simplemente o son personas que están del lado de la Ley o son gentes que no están del lado de la Ley; y en este caso a quienes no estén del lado de la Ley, a quienes de alguna forma estén participando, siendo tolerantes con la ejecución de estos actos delictivos debe aplicarse toda la fuerza del Estado”