Buen manejo de las Finanzas Públicas y la Deuda Pública; se entienden bien Videgaray y Carstens
En medio de un ambiente mundial complicado por la drástica caída de los precios del petróleo, que ha desbaratado países como Brasil y Venezuela y Rusia, México se mantiene en un nivel competitivo internacional, gracias a medidas de orden económico y financiero que ha tomado el Gobierno de México, secundado por el Banco de México, su Banco Central.
Y eso ha ocurrido gracias a un buen entendimiento entre los titulares de la Secretaría de Hacienda, Lic. Luis Videgaray y del Banco de México, doctor Agustín Carstens, quienes han sabido interpretar las metas de política económica que ha trazado el Presidente Enrique Peña Nieto.
Siempre con independencia, el Gobernador del Banco de México, doctor Agustín Carstens, ha sabido desempeñar su papel financiero, sin caer en la tentación de dañar la política económica del Gobierno Mexicano, sobre todo en momentos en que han podido sobrevenir choques, toda vez que los objetivos y metas de ambas entidades no sólo son diferentes sino muchas veces contradictorios.
Así por ejemplo, el papel constitucional del Banco de México es “combatir la inflación”, en tanto que el rol del Gobierno Federal, en este caso representado por Luis Videgaray, Secretario de Hacienda, es hacer lo necesario para que el país crezca; y eso muchas veces, en el pasado, ha llevado a una confrontación entre quien sea Gobernador del Banco de México y quien entonces actué como Secretario de Hacienda.
Hombres inteligentes, los dos, Carstens y Videgaray, han sabido compaginar sus funciones públicas para que el país pueda salir adelante, como lo hace, sin que se dañe la tendencia al crecimiento que tiene México, no obstante la caída drástica de los precios del petróleo, que ha desquiciado a los países petroleros, incluida Rusia, así como Venezuela, Brasil, Canadá, que se han visto gravemente afectados en su economía.
Si hay dos héroes de la película mexicana en estos momentos, son Luis Videgaray, Secretario de Hacienda y Agustín Carstens, Gobernador del Banco de México.
Así lo demuestra el comportamiento de las Finanzas Públicas y la Deuda Pública a la fecha de abril de 2016:
En abril, el Banco de México enteró al Gobierno Federal su remanente de operación del ejercicio 2015, el cual ascendió a 239.1 mil millones de pesos. En cumplimiento de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, 70 por ciento de los recursos se destina a disminuir la deuda pública y 30 por ciento a la adquisición de activos financieros, mejorando la posición financiera del sector público federal.
- En abril, los ingresos presupuestarios crecieron 87.2 por ciento real anual.
Excluyendo el entero del remanente de operación del Banco de México, los ingresos se incrementaron 16.6 por ciento respecto al mismo mes de 2015. Entre enero y abril, los ingresos presupuestarios aumentaron 16.2 por ciento real, los ingresos tributarios no petroleros tuvieron un crecimiento real de 7.5 por ciento y los no tributarios de 164.2 por ciento real respecto al mismo periodo del año anterior.
- En abril de 2016, el gasto neto pagado y el gasto programable aumentaron
5.2 y 0.4 por ciento real anual, respectivamente, sin considerar la aportación patrimonial a Pemex por 26.5 mil millones de pesos. Entre enero y abril ambos indicadores, incluyendo el apoyo a Pemex, disminuyeron en
3.3 y 5.0 por ciento real respecto al mismo periodo de 2015. Destaca la reducción en términos reales del gasto de operación de 4.6 por ciento.
- El superávit público acumulado entre enero y abril se ubicó en 177.1 mil millones de pesos, que se compara con el deficit registrado en el mismo periodo de 2015 de 116.3 mil millones de pesos.
- Por su parte, los Requerimientos Financieros del Sector Público a abril de
2016 registraron un superávit de 156 mil millones de pesos. Este resultado, así como el monto observado del balance público, es congruente con las metas anuales aprobadas por el H. Congreso de la Unión para 2016, así como con la aplicación en su totalidad del entero del remanente de operación del Banco de México para fortalecer la posición financiera del sector público.
- Al cierre de abril de 2016, el saldo de la deuda interna del sector público federal se situó en 5 billones 159.6 mil millones de pesos, monto que disminuyó 220.3 mil millones de pesos con respecto al cierre de 2015, cuando representó 5 billones 379.9 mil millones de pesos. Esto como resultado de un endeudamiento de 168.8 mil millones de pesos, de un aumento en los activos financieros por 415.7 mil millones de pesos y ajustes por 26.6 mil millones de pesos. Por su parte, la deuda externa se ubicó en 173.8 mil millones de dólares, cifra que aumentó en 12.2 mil millones de dólares con respecto al cierre de 2015 que fue de 161.6 mil millones de dólares. Este resultado se derivó de un endeudamiento neto de 12.7 mil millones de dólares, de un aumento de los activos de 2.1 mil millones de dólares y ajustes por 1.6 mil millones de dólares. La evolución del endeudamiento del sector público es congruente con la estrategia de consolidación fiscal para 2016 además de ser consistente con los techos de endeudamiento aprobados por el H. Congreso de la Unión para 2016.
Por el Lic. Mauro Jiménez Lazcano, Director General de la Revista Macroeconomía.