A su llegada, la nueva Embajadora de EU, Roberta Jacobson se enamora de México
Con una ánimo excelente, de buen talante, atenta y de gran personalidad, arribó a nuestro país la Embajadora Designada de los Estados Unidos de Norteamérica, Roberta Jacobson a México.
Desde que hizo su primera aparición la Embajadora Jacobson corroboró el interés de nuestro país por su llegada, así lo sintió al pararse frente a poco más de medio centenar de medios de comunicación que con ávido interés la esperaban en la sala del Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México.
Con una singular sonrisa y de muy buen semblante, la Embajadora Jacobson expresó su alegría y entusiasmo de estar en nuestro país, indicando lo orgullosa de ser la representante del gobierno norteamericano y anticipo su interés el continuar aprendiendo sobre nuestra nación; “voy a seguir consolidando los puentes que nos unen como aliados, amigos y vecinos”, declaró.
Como en Casa
En su presentación en la sede de la Embajada de los Estados Unidos de América, tuvo una cálida recepción hecha por todo el personal tanto operativo como el administrativo y luego de reiterarles su apoyo para lograr una administración destacada, el personal reunido en la explanada central de la sede de Reforma brindo aplausos y parabienes a la funcionaria quien expresó sentirse como en casa.
Inicio de Actividades Diplomáticas
Tras su presentación en la sede de la Embajada norteamericana, la Embajadora Roberta Jacobson se dirigió a las oficinas de la Cancillería mexicana en la avenida Juárez, a sólo 10 minutos de la que será a partir de esta fecha el lugar donde despache; ahí la Secretaria de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu la recibió, y a quien le entregó las Copias de Estilo de las Cartas Credenciales que presentará ante el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, en los próximos días; ambas funcionarias mantuvieron una charla de manera informal, a nombre del Gobierno, la Secretaria Ruíz Massieu le dio la bienvenida a nuestro país y le expresó su completa colaboración con el gobierno norteamericano para lograr una mejor relación bilateral
Primera Visita: Xochimilco
Ante un fin de semana que para muchos predecía una toma de forma mas administrativa, la Embajadora Jacobson sorpresivamente tomó rumbo al sur de la Ciudad de México y enfilo su camino hacia una de las reservas ecológicas más bellas de la ciudad, llegando a Xochimilco, lugar que le dio una hermosa vista llena de color y tradición mexicana, pues ahí mismo la Embajadora visitó los canales a bordo de una trajinera, disfruto de la vegetación y se lleno del color de las flores de los invernaderos, adornando su cabeza con una corona de flores, rito obligado a los visitantes extranjeros; detalle del cual pidió tomar registro en una agradable fotografía.
La Señora Jacobson con una sola frase mostró su admiración por el lugar al expresar: “!Hermoso Xochimilco!”
Un fin de Semana lleno de sabor
Para el domingo 29 de mayo, la Embajadora Roberta Jacobson, procuró una agenda de visitas, ahora le toco al Centro Histórico de la Ciudad de México; ataviada de manera informal, previniendo un día caluroso en la capital del país, la Señora Jacobson se dispuso a disfrutar del sabor de una de las más antiguas tradiciones del centro, con buen apetito, saboreo de los afamados “Churros de El Moro”, acompañados del emblemático chocolate, sabores que le dieron un buen tono al humor de la Embajadora, pues dio rienda suelta a un magnifico desayuno; ante lo cual expresó: “!Magnifico el Centro Histórico!”
Continuando con su recorrido por la zona, no pudo resistirse al olor del horno pastelero que llenaba la avenida por donde transitó y visitó una de las pastelerías de más arraigo para los capitalinos, y sin más entró a conocer todas las formas, colores y nombres de los pastelillos que ahí se fabrican; como una parroquiana más que busca satisfacer ese gusto por la panadería de calidad.
Da en verdad gusto, como la personalidad y carácter de la Embajadora Jacobson llena su entorno, alejado de una apremiada seguridad, mostrando confianza en su caminar por las calles de centro histórico, viendo los múltiples edificios emblemáticos y antiguos palacios, las calles llenas de gente en los comercios, llegando a confundirse con ellos, pero eso sí con una enorme disposición de aprender más de nuestra cultura, tradición y convivencia. De esta visita la Embajadora reconocería: “!El Centro Histórico es un lugar hermoso!”.
Por Enrique Ramírez Aldana, Subdirector de Macroeconomía.