Un País de Leyes y con Gobierno Institucional
México está entrando a una nueva etapa de su desarrollo histórico para convertirse en un país de leyes con Gobierno Institucional
En eso coinciden lo mismo juristas que economistas, sociólogos, filósofos y hombres de Estado; el requisito máximo e indispensable para que México inicie su despegue definitivo para alcanzar la elevación de las grandes potencias del mundo es establecerse ya como un país donde rija sin excepciones el denominado Estado de Derecho; es decir, que simplemente las leyes se cumplan, y que los funcionarios públicos de todo nivel las acaten y se sometan a ellas.
Eso es lo que representa la entrada del Presidente Enrique Peña Nieto al mando de la República, y esa es la condición básica del desarrollo económico, político y social de la Nación.
La vigencia plena del Estado de Derecho reducirá el costo de transacción de todo negocio, y dará seguridad absoluta a los inversionistas nacionales y extranjeros, así como a los ciudadanos y habitantes en general del país.
Ya era hora de que en México se respeten a cabalidad los derechos del Hombre y del Ciudadano y de que la autoridad, cualquiera que sea su rango o nivel se sujete a las leyes y actúe conforme a ellas.