Viendo hacia el futuro
Evaluar la historia y la realidad presente sin parar la marcha hacia el progreso
Por el Lic. Mauro Jiménez Lazcano,
Director General de la Revista Macroeconomía
Poco tiempo le queda ya al Presidente Andrés Manuel López Obrador para terminar sus obras principales y dar paso al nuevo gobierno que se asoma ya en figuras como Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Ricardo Monreal, Ricardo Anaya, Margarita Zavala, Alfredo Del Mazo, Enrique De la Madrid, Enrique Alfaro, Samuel García y otros aspirantes y precandidatos ya presidenciales, que en una forma u otra le darán un nuevo enfoque al gobierno, con nuevas y diferentes ideas que conduzcan a la nación mexicana hacia un destino de mejoramiento; porque no hay ni podría haber en México una continuidad absoluta sobre lo que se está haciendo hoy.
Así, por ejemplo, si la que resultara nominada candidata presidencial de Morena fuera Claudia Sheinbaum y llegará a ganar las elecciones, cosa que no está asegurada en absoluto, no podría seguir con los lineamientos de esta Cuarta Transformación, porque no es esa la costumbre mexicana: hay que recordar por ejemplo lo que hizo Lázaro Cárdenas con Plutarco Elías Calles, cuando este intentó sopreponerse a su sucesor.
Y tampoco habría una continuidad total si el elegido llegase a ser Marcelo Ebrard Casaubón, quien es un excelente Canciller y buen funcionario, pero toda su personalidad y pensamiento político son distintos a los del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Y si el escogido fuera el senador Ricardo Monreal tampoco podría haber un seguimiento ciego de la política actual, porque él mismo lo ha dejado ver así: respeta al Presidente y a sus políticas, pero él tiene su propio concepto de gobierno, de federalismo, y de un proyecto de política nacional.
Y si fueran otros de los partidos de oposición como los mencionados: Ricardo Anaya, Margarita Zavala, Alfredo Del Mazo, Enrique De la Madrid, Enrique Alfaro, Samuel García, cada uno de ellos trae su propio proyecto para el progreso de nuestro país.
Así que, lo mejor para el Presidente Andrés Manuel López Obrador es tomar en cuenta que el tiempo se le acaba para culminar con un proyecto propio de nación, que puso en marcha y que tendrá que ser evaluado en estos tres años de gobierno que para él terminarán el 30 de septiembre de 2024.