Juan Arvizu: Un periodista con Ética
Por Kenia López Rabadán
Hacer periodismo en nuestro país no es tarea fácil, hacer periodismo con ética es aún una tarea mayor.
Esta pandemia nos ha arrebatado a personas que queremos, ha develado la importancia de reconocer la trascendencia de quienes nos rodean, hoy más que nunca hemos tenido un aprendizaje: hay que tratar a las personas como si fuera la última vez que las vamos a ver, con respeto y gentileza, para qué, -si se van, o te vas- siempre sepas que fuiste la mejor versión de ti con los otros. Así era Juan Arvizu.
Hoy recuerdo perfectamente la última vez que vi a mi querido Juan, estaba en el Senado de la República trabajando como siempre, era diciembre de 2020, lo saludé, platicamos y nos despedimos con una sonrisa.
Un hombre íntegro con cuatro décadas de trabajo periodístico ininterrumpido destinó con ética y honorabilidad su esfuerzo diario para comunicar a los mexicanos lo acontecido en la esfera política.
Extrañaremos a Juan y a su destacada labor como cronista legislativo, fué reconocido con el Premio Nacional del Periodismo en 1997 y homenajeado por el Senado de la República.
Se ha ido un ser humano extraordinario. Tu familia, el Universal -tu casa editorial-, los legisladores, tus colegas y tus lectores, estoy segura te extrañaremos siempre. Te mando un abrazo al cielo querido Juan.