Respuestas a la crisis del COVID19. Recomendaciones para México: José Ángel Gurría
Participación en el FORO JESÚS SILVA–HERZOG FLORES del Titular de la OCDE
Posted by Foro Jesús Silva-Herzog Flores on Thursday, May 28, 2020
Videoconferencia «Respuestas a la crisis del COVID19. Recomendaciones para México», impartida el 28 de mayo de 2020 por José Ángel Gurría, Secretario General de la OECD.
El Dr. José Ángel Gurría, Secretario General de la OECD, resaltó que el 2020 será uno de los años más desafiantes de la historia, la crisis del Covid-19 nos obliga a actuar de manera diferente, pues tenemos el desafío económico, sanitario, de gobernabilidad. Con esto se ponen a prueba nuestros gobiernos.
Se refirió al panorama económico mundial: En 2019 la economía mundial estaba en desaceleración, incertidumbre, tenciones comerciales. La incertidumbre es el peor enemigo del crecimiento, por lo que en el 2019 bajamos nuestras previsiones de crecimiento para el 2020, pero ya en marzo de este año se vislumbraban algunos de los efectos del Covid-19 en países como en Asia.
Súbitamente todo cambio, la pandemia tuvo proporciones mundiales y un impacto brutal en las economías. Los gobiernos se vieron obligados a tomar medidas sin precedentes para contener la pandemia, al no haber medicinas, vacunas ni cura se recurrió a medidas que apagaron los principales motores de la economía mundial.
En abril se observó que el impacto negativo del crecimiento anual sería de 2 puntos porcentuales por cada mes de confinamiento. El 10 de junio se publicarán las perspectivas económicas. En el 2020 la economía mundial sufrirá una contracción peor que la crisis del 2009, todas las economías se verán afectadas por la interrupción de las cadenas mundiales de proveeduría. El panorama mundial se deterioró drásticamente en pocos días y ningún organismo internacional contemplaba una crisis de esta magnitud.
Desde el inicio de la crisis la OECD ha estado haciendo análisis, diseñando escenarios, recomendaciones de políticas en una variedad de sectores, todo esto se ha puesto a disposición del público de manera digital; se cuentan con casi 100 trabajos que proponen diagnósticos y recomendaciones de cómo responder al Covid-19, se elaboró un estudio llamado consideraciones sobre políticas públicas para enfrentar el Covid-19.
Debemos repensar las intervenciones públicas en las economías de mercado, e integrar mejor la productividad e eficiencia con los objetivos de resiliencia y sustentabilidad, es decir, poner frente a los ejercicios de gobierno a la gente, la economía y el planeta, las tres cosas son igualmente importantes. Se debe ayudar a los gobiernos a construir un nuevo contrato social, las políticas deben centrarse en la reducción de las desigualdades, y pensar en los más vulnerables.
La más grande responsabilidad intergeneracional es el cambio climático, la biodiversidad, el agua, el aire, los océanos, los bosques, la degradación medioambiental. Es esencial transformar los patrones de producción y de consumo para preservar el medio ambiente.
La OECD ha construido una serie de recomendaciones para ayudar a los países en su recuperación: el dilema entre atender la salud o atender la economía es un falso dilema. Debemos ganarle la guerra al virus para atenuar el dolor y las pérdidas humanas, que permita enfocarnos más rápido en la etapa de la reconstrucción.
Pidió utilizar todos los estímulos fiscales, la política monetaria y crediticia para ganarle al virus, el peso de la deuda adicional durante la crisis se presentará más adelante como un reto a la recuperación, por ello él no ve una recuperación en forma de V, la recuperación tendrá forma de U. habrá una deuda como resultado de estos esfuerzos.
En este contexto, en México la pandemia nos alcanzó en un momento en el que ya era complicada la economía nacional, pues venía padeciendo una contracción que fue producto del declive de la inversión, en el 2019 tuvimos incertidumbre sobre si se concretaría el TLC, reconoció que hubo una política fiscal prudente, y un subejercicio muy común en el primer año de gobierno, a estos elementos se agregó la necesidad de las reformas estructurales en áreas como la educación, las habilidades de la fuerza de trabajo, competencia, fiscalidad, las pensiones, la seguridad, Pemex, el estado de derecho.
Esperábamos que en 2020 tuviésemos un repunte y creciéramos un poco por debajo del 1 por ciento y un poco arriba del 1 por ciento en el 2021, pero llegó el coronavirus y ahora se habla de unas contracciones, en donde ya no importa el porcentaje. Nuestras estimaciones prevén que México sufrirá una recesión más marcada en comparación con otras economías de la región, debido a que nuestro país es más abierto y tiene más inversiones internacionales en donde afecta más el paro del comercio y las inversiones internacionales, además del efecto negativo en áreas clave del crecimiento como es el turismo, remesas internacionales, el petróleo y el sector automotriz.
La magnitud de la recesión dependerá de cómo evolucione la pandemia y de las medidas que se están tomando y se tomen en los próximos meses.
Compartió algunas recomendaciones que pueden fortalecer la estrategia de México ante la pandemia:
- La política macroeconómica. Al igual que lo hacen todos los países, México puede usar su política macroeconómica como una protección social e inclusión. Es importante proveer de apoyos a las familias y a las empresas, ofrecer estímulos a la actividad económica. Esta crisis debe llevar a México a hacer un esfuerzo extra para aumentar la recaudación y combinarlo sin que se afecte la actividad empresarial. La recaudación en México sigue siendo la más baja de la OECD, el promedio es de 34 por ciento y en México es del 16 por ciento. Es buen momento de corregir las excepciones del sistema tributario, el cual es regresivo. Es buena inversión apoyar al SAT para luchar contra la evasión.
Cobra gran importancia las cuentas de mexicanos en el extranjero, al día de hoy a nivel mundial hay más de 50 millones de cuentas bancarias con valor de 5 trillones de euros. A fines de 2019 los gobiernos de América Latina identificaron cerca de 23 mil millones de euros de impuestos no declarados. México es parte de este esfuerzo, el SAT tienen una lista de los ciudadanos que tienen cuentas en el exterior.
- Política financiera. México toma medidas para proveer liquidez y ayudar a que el flujo crediticio continúe; Banxico recortó las tasas en 275 puntos básicos, le quitó 3 por ciento a las tasas y es posible que haga más recortes en las próximas semanas, ya que la inflación ha bajado mucho ante la baja de demanda; estas medidas son fundamentales para la crisis financiera.
- El sistema de salud.El Covid-19 ha revelado la importancia de contar con sistemas de salud fuertes. México ha tomado medidas en este sentido, pero habrá que redoblar esfuerzos y dedicar más presupuesto al tema de salud, fortalecer la infraestructura, los sistemas de salud, la calidad. El aumento del gasto público en salud el promedio de la OECD es del 9 por ciento y en México es del 5.5 por ciento.
- Reestructurar nuestras economías para enfrentar el cambio climático, el medio ambiente, la biodiversidad y la salud. Hay un fuerte vínculo entre la salud y el medio ambiente, por lo que México debe poner atención en el proceso de descarbonización y acelerar su paso hacia la transición a las energías renovables. Se debe aprovechar el gran potencial que tiene México en el tema de las energías renovables, se cuenta con una gran variedad de sistemas productibles renovables.
- Fortalecer los sistemas de protección social y de bienestar entre la población más vulnerable.La mayoría de los trabajadores opera en la informalidad y cerca del 35 por ciento de la población vive en hacinamiento, por lo que México necesita fortalecer sus sistemas de protección y bienestar social, y reducir la informalidad, para ello se debe aumentar el gasto social, pues lo tenemos muy bajo en promedio de un 8 por ciento del PIB, seguir construyendo un sistema educativo que dote a los estudiantes de destrezas frente al mercado laboral, trabajar en el sistema de pensiones.
- Fortalecer apoyos a las empresas, particularmente a las pymes.Aunque México ya ha tomado medidas al respecto, aún puede hacer más, tal como programar recortes a las horas de trabajo, posponer los pagos de impuestos, de seguridad social, lo cual ayudaría al flujo de las empresas; asimismo, diseñar programas de apoyo a los sectores más afectados por la crisis sanitaria, tal como el turismo, las aerolíneas.
- Propiciar el uso de las tecnologías digitales. México sigue teniendo el nivel más bajo de la conectividad de la OECD, sólo el 64 por ciento está conectado a Internet, debe invertirse en el mejoramiento de las competencias digitales de los ciudadanos. La seguridad digital debe ser parte del paquete que promueve la profundización digital.
- Fortalecer apoyo a la ciencia, tecnología e innovación.México es el que menos invierte en tecnología, la media de la OECD es de 2.4 por ciento. El Covid-19 confirma que esto debe cambiar, invertir en la investigación, en la cooperación multilateral en ciencia e innovación.
- Fortalecer la capacidad de respuesta de nuestros sistemas educativos, y de competencias, habilidades y destrezas.Los desafíos en México en el terreno educativo son enormes. El Covid-19 ha revelado limitaciones en el sistema de educación. Sólo el 45 por ciento de la población mayor de seis años usa computadora, además de que algunos docentes no están preparados para las tecnologías. Se debe mejorar las competencias y habilidades de la población en el ámbito digital; así como en la preparación de los docentes.
- Fortalecer las capacidades del Estado.México tiene que fortalecer sus instrumentos de prevención y su estrategia de digitalización, así como la coordinación y coherencia entre los diferentes niveles de gobierno, así como la capacidad de evaluar los resultados de las políticas.
El Covid-19 ha resaltado la importancia de contar con funcionarios públicos profesionales, instituciones fuertes y competentes, avanzar hacia un modelo fiscal más fuerte que dependa menos del petróleo. México tiene que asegurarse de que la estrategia de desconfinamiento esté basada en la ciencia y en las mejores prácticas, hasta que una vacuna esté disponible, los optimistas hablan de este año aunque otros de 12 meses o 18 meses.
Las estrategias para el desconfinamiento deben estar basadas en datos, ciencia y pruebas. El levantamiento gradual de las restricciones debe estar apoyados en pruebas.
Citando a Jesús Silva-Herzog, comentó que algo más costoso y trágico es desaprovechar la crisis y aprender sus lecciones, México ha renacido varias veces después de varias crisis, esta no debe ser la excepción. Se requerirá de un gran esfuerzo a través de la implementación, conocimiento técnico y participación social, ciencia y política, liderazgo y unidad, transparencia, instituciones fuertes y políticas públicas de alta calidad basadas en evidencia científica y las experiencias internacionales.