Transición Pacífica y Ordenada
En la más concurrida Elección Presidencial de México, este 1 de julio triunfó el Candidato Andrés Manuel López Obrador de la Coalición MORENA, PT, PES, con 53% de la votación emitida, en un giro hacia la izquierda política que no se había registrado en mucho tiempo.
La alternancia en el Poder se había dado en nuestro país del centro (PRI), con el Presidente Ernesto Zedillo a la derecha (PAN), con Vicente Fox y Felipe Calderón, pero nunca se había registrado un giro del centro (PRI), con Enrique Peña Nieto, a la izquierda, como ocurre ahora, con Andrés Manuel López Obrador.
El forcejeo entre las fuerzas políticas mexicanas se registró en los últimos seis meses, mediante intensas campañas electorales y debates políticos, pero nada hizo cambiar a los partidarios de Andrés Manuel López Obrador que resistieron todas las argumentaciones en contra.
Nada pudo cambiar la opinión del voto duro de López Obrador, no solamente en sus territorios tradicionales del Sur-Sureste y el Centro del país, sino de los Estados de Norte y las costas.
DIVISION DE CLASES SOCIALES; EL PAIS SE PARTIO EN DOS
En mucho, las elecciones presidenciales de este 1° de julio fueron la culminación de una feroz lucha de clases sociales: la clase media, en sus diferentes aspectos y niveles, contra las clases bajas, de trabajadores, y jóvenes estudiantes de todos los niveles, de origen proletario, en su generalidad.
También fue una lucha generacional, en la que se impuso la mayoría de jóvenes que desean surgir a la vida económica y social, y ascender las escalas sociales.
Con el 53% de la votación efectiva a favor, el triunfador Andrés Manuel López Obrador tiene enfrente a la otra mitad de la sociedad mexicana, que lo rechaza abiertamente.
TRANSICIÓN PACIFICA Y ORDENADA
El Sistema Político mexicano está logrando en esta Elección Presidencial una transición democrática pacífica y ordenada; no hay que olvidar que Andrés Manuel López Obrador había amenazado primero a los banqueros, en Acapulco, con “soltar al tigre”, refiriéndose a la probabilidad de una revuelta social en caso de que no se reconociera su triunfo.
La maduración del Sistema Político mexicano ha logrado la realización de una transición pacífica y ordenada, de acuerdo a la política del Presidente Enrique Peña Nieto, consistente en “reconocer la voluntad popular”, y actuar bajo las leyes electorales vigentes y las decisiones tanto del Instituto Nacional Electoral como del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
México, en esta Elección Presidencial, ha ratificado su vocación democrática, y ha alcanzado una madurez política de alto nivel, reconocida internacionalmente por los mandatarios e instituciones democráticas de todo el orbe, como lo demuestran las llamadas de los grandes estadistas y mandatarios de decenas de países, felicitando tanto al triunfador en estas elecciones, como al pueblo de México por su comportamiento democrático.
Bien por México y su pueblo.
Por el Lic. Mauro Jiménez Lazcano, Director General de la Revista Macroeconomía.