Senado llama a fortalecer la Unidad Nacional
Debemos fortalecer la unidad nacional en torno a la Constitución, como un esfuerzo conjunto en la lucha contra la pobreza, a favor de la equidad e igualdad, la consolidación de la democracia y la vigencia plena del Estado de derecho, convocó el presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, Miguel Barbosa Huerta.
La unidad nacional, enfatizó, debe encontrar mecanismos que garanticen el bienestar de las familias y proyecten al país hacia el desarrollo y la prosperidad, y combatan corrupción, impunidad y autoritarismo.
Advirtió que México atraviesa por un momento complejo, que no es producto de los errores o la parálisis de uno sólo de los Poderes. Se trata, aseguró, de una combinación de situaciones coyunturales y estructurales que deben corregirse de fondo, donde los tres Poderes de la Unión –Ejecutivo, Legislativo y Judicial– deben asumir sus responsabilidades.
“El dolor, la desconfianza y la inconformidad que se expresa en algunos sectores de nuestra sociedad tienen su origen en esas conductas antirrepublicanas que quebrantan la letra, el sentido y la finalidad de nuestro texto constitucional”, consideró.
En el marco del seminario “La Constitución, análisis rumbo a su centenario”, el Senado de la República realizó una sesión solemne en el Recinto Parlamentario de Palacio Nacional.
A nombre del Senado de la República, Barbosa Huerta hizo un llamado a la ciudadanía para que el próximo 7 de junio ejerza su derecho a votar, “sin presiones”. Particularmente, dijo, resulta relevante la participación de los jóvenes, que tienen la posibilidad de ejercer por primera vez este derecho.
Agregó: “Respetuosamente expresamos un exhorto a los partidos políticos a realizar campañas que contribuya al fortalecimiento de nuestra democracia y a los candidatos a ceñirse a las normas electorales”.
Con esta sesión solemne, el Senado expresa a la nación su voluntad de contribuir en la conmemoración del Centenario de la Constitución, no sólo como una ceremonia cívica, sino como parte de un proceso que fortalezca nuestro pacto social y que conlleve a una reflexión profunda sobre nuestra Carta Magna.
Después de 98 años, y más de 500 reformas a su contenido, agregó, resulta necesario reflexionar sobre el espíritu que anima el pacto social.
En representación del Presidente de la República, el secretario de Educación, Emilio Chuayffet Chemor, recordó que a principios del siglo pasado, ante los momentos de turbulencia y el deterioro de las instituciones, México se vio en la necesidad de fortalecer su sistema político, para garantizar la estabilidad de las instituciones, la seguridad de las personas y de su patrimonio.
De esta manera, en 1917 la Constitución estableció las bases para una nueva etapa en el país. En ella se plasmaron logros que derivaron de una revolución política, se reconocieron derechos sociales e individuales, así como la organización política del Estado y los instrumentos para la administración de la justicia.
Actualmente, dijo, que en el Congreso se alcanzaron los acuerdos políticos necesarios para impulsar reformas de gran calado en materia educativa, político-electoral, fiscal, telecomunicación y competitividad, entre otras que nos permitan dar sentido a la consolidación de la democracia, al ejercicio de los derechos y el fortalecimiento de la economía.
Dijo que no podemos ignorar los grandes y serios problemas que hoy aquejan a nuestro país y que requieren de la unión de nuestras voluntades y de los acuerdos de todas las fuerzas políticas para encontrar mejores respuestas a estos retos.
El presidente de la Cámara de Diputados, Julio César Moreno Rivera, aseguró que los integrantes de la LXII Legislatura han logrado la aprobación de “trascendentes reformas” y aseguró que la Constitución seguirá cambiando y transformándose para adaptarla a las circunstancias de los mexicanos.
Las modificaciones a la Carta Magna –agregó– seguirán para regular jurídicamente las nuevas situaciones, proteger con mayor eficacia los derechos humanos y fortalecer el sistema democrático de México.
No podemos ignorar los grandes y serios problemas que hoy aquejan al país, los cuales requieren de la unión de voluntades y acuerdos de todas las fuerzas políticas, a fin de encontrar mejores respuestas a los retos que se presentan en estos momentos de profundas transformaciones.
El ministro Luis María Aguilar Morales, presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, manifestó que la razón del Estado es el pueblo, por lo que ninguna constitución, gobierno, ni sistema de justicia, es posible si no se sustenta en una real y concreta defensa y respeto a los derechos de las personas.
Aseveró que los gobiernos que emanan de la actual Carta Magna están obligados a respetar y defender dichos derechos, mientras que los jueces de la República deben vigilar ese respeto y su cumplimiento efectivo.
Señaló que las instituciones están obligadas a ofrecer soluciones eficaces a los grandes y urgentes problemas nacionales, por lo que ratificó el compromiso del Poder Judicial para acatar plenamente lo que mandata la Constitución de 1917 y llevar a cabo su cabal observancia.